Magia
A pesar de ser un espectáculo teatral la lucha libre siempre me gustó, dejé de verla a mediados de los noventa porque sentí que había perdido la magia que me apasionó la primera vez que la vi, en mi opinión la época de oro de la lucha libre fue la década de los ochenta y la mejor federación la WWF.
Para mí los luchadores de los ochenta fueron verdaderos genios y artistas, como por ejemplo el gran Tito Santana con su grito de combate ¡ARRIBA! Y su cinturón de campeón intercontinental que perdió posteriormente con Macho Man Randy Savage otro genio de las luchas.
Como olvidar a las grandes parejas que se disputaban los cinturones de campeones mundiales (tag team championship) como the british bulldogs, Brutus Beefcake y Greg Valentine, King Kong Bundy y Big John Studd, the hart foundation, the killer bees, the iron Sheik y Nicolai Volkoff, etc. Que grandes luchadores y como diría mi abuelo “esas eran luchas”.
Para muchos el más grande de todos los tiempos fue Hulk Hogan, de hecho debo reconocer que fue un luchador extraordinario pero a mí particularmente no me caía bien porque me aburría su fanatismo por su país (que era muy respetable pero que a mí me saturaba) y que me perdonen los fanáticos de Hogan pero yo celebré como nunca cuando perdió el título mundial a manos de The Ultimate Warrior.
Habían otros luchadores que eran buenos pero que por culpa de sus parejas de combate perdían siempre, me daba rabia cuando Leaping Lanny Poffo (hermano del gran Macho Man Randy Savage) o SD Jones eran derrotados por la mala performance de sus socios de lucha.
Qué lástima que esa gran generación de luchadores ya se haya ido pero queda el consuelo de ver esos gloriosos combates por internet o por video y a mí solo me queda decirles a esos grandes luchadores muchas gracias por toda la magia que nos regalaron.
Ignacio
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