Cuando el delito es abortar y no la violación
En países como Perú se comenten 50 violaciones al día. La mayoría de estas violaciones terminan en un embarazo no deseado. Las víctimas que deciden abortar lo tienen que hacer de forma clandestina ya que el aborto es ilegal. Las víctimas no solo tienen que vivir con el dolor psicológico de haber sido violadas si no que si no quieren tener el niño tienen que buscar en la clandestinidad un “médico” que le practique un aborto clandestino.
Según el Ministerio Público recibió más de 17.000 denuncias de violaciones. Esta cantidad coloca a Perú en el puesto número 16 de denuncias de violación a nivel mundial, el primero en Sudamérica.
Ante esta alarmante situación, varias ONG feministas han presentado un proyecto de ley en el Congreso para debatir la despenalización del aborto en caso de violación.
Las mujeres de Perú están abortando en la cocina de una enfermera en lugar de hacerlo en un quirófano. Las grandes diferencias sociales existentes en Perú provocan que no todas las mujeres puedan costearse un lugar seguro para practicar un aborto. Al ser ilegal el aborto no hay datos ciertos sobre la cantidad de mujeres que han perdido la vida practicando un aborto clandestino. Las ONG afirman que la ampliación de los supuestos del aborto no va a incrementar la cantidad de mujeres que aborten, pero si va a reducir la cantidad de mujeres que se van a centros ilegales, insalubres y van acudir a centros regulados con la consiguiente mejora en las intervenciones. Estas ONG le preguntan al Estado que va hacer para proteger la salud de las mujeres que han sido violadas.
El único supuesto en el que se permite abortar en Perú es cuando la vida de la madre está en peligro si se sigue adelante con el embarazo. El actual Código Penal fue aprobado en 1924, con lo que a día de hoy está un poco anticuado y no se encuentra en sintonía con la realidad social del país.
Algunos colectivos pretenden incorporar la causa por agresión sexual al actual código vigente. También quieren que se creen servicios integrales de atención a las víctimas de violación que incluyan la interrupción voluntaria del embarazo a cargo del Estado.
La opinión de la sociedad Peruana se encuentra dividida ante la despenalización del aborto en caso de violación sexual. Según una encuesta el 53% de la población aceptaría la despenalización.
El problema de debatir abiertamente el tema del aborto es que es un tema que provoca pérdidas para las aspiraciones políticas. Para poder llegar a un acuerdo se tiene que producir un debate abierto y sin miedo a quien pueda ofender.
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