La calidad para el cliente

El tema de calidad hoy en día es un tema que se ha vuelto muy mencionado e importante, ya que las personas con la mala experiencia de comprar cosas económicas a un precio accesible, han obtenido como resultado gastar más dinero, ya que al comprar productos de mala calidad se ven obligados a pagar las reparaciones de los productos y a comprar nuevamente el producto pero de mayor calidad.

Ahora el consumidor exige calidad y garantía del producto aunque sea más caro, y comparan de una marca a otra tanto precio, calidad, prestación, garantía y durabilidad. El constante cambio también es una parte fundamental en el tema de calidad, e inclusive unos mercados lo realizan más que otros, pero finalmente las empresas se tienen que adaptar a las necesidades del cliente, y al satisfacerlo no permanece estancado y puede obtener el número 1 en ventas y calidad.

Hoy en día nos damos cuenta que los productos japoneses y chinos son altamente consumidos por nosotros los mexicanos, ya que nos ofrecen un precio accesible y un alto nivel de calidad, el cual nos obliga a no ser completamente consumidores del mercado mexicano.

Cabe mencionar que las expectativas de calidad en los frecuentes consumidores ante la adquisición de nuevos productos se han prestado al intercambio de mercancías entre distintos países logrando de esta manera que se expanda el mercado y se logre más calidad a nivel internacional y de esta manera se obtenga niveles iguales de competencia.

Es muy importante que el cliente se sienta seguro al comprar cierto producto de alta calidad, en donde lo motive una alta garantía y buen posicionamiento en el mercado. Los clientes deben estar conscientes de que a mayor calidad tendrá un menor costo a un corto, mediano o largo plazo, ya que no se verán en la necesidad de hacer una recompra o sustitución del producto donde podría gastar más dinero tiempo y esfuerzo.

La calidad es una necesidad que debemos exigir como consumidores hacia el mercado nacional en internacional donde buscamos un resultado final con excelencia tecnología y constante innovación para la satisfacción total del cliente día con día.

Con una buena calidad no se verá obligada la empresa productora a gastar cierto porcentaje de sus ventas en arreglar, desechar o repetir el servicio, ya que el hacer mal las cosas es lo que cuesta dinero, simplemente la calidad no cuesta y a todos nos conviene.