Cómo aprender a ser un emprendedor productivo
La era del emprendimiento ha llegado para quedarse en todo el mundo. Esta ha sido la motivación de muchos para lanzarse al agua e iniciar su camino emprendedor. La novedad es que ahora no se distingue muy bien qué edad es la propicia para iniciar un negocio propio, el mundo avanza tan rápido que jóvenes y adultos de todas las edades están metido de cabeza en ello. Desde artistas a personas que ofrecen servicios a gran escala. Hoy día los esquemas y formas tradicionales en las que se desarrollaba el trabajo están cambiando y queriendo o no, el mundo se está adaptando a ello. Por eso surgen propuestas como Tidytoc, que apoyan a los emprendedores. Hay vaios aspectos para conocer antes de lanzarse al vacío. El poder de inventiva del ser humano es innato, pero no es menos cierto que el emprendimiento que vemos hoy tiene algunos matices que apenas están naciendo. Por eso cabe preguntarse: ¿Realmente es tan sencillo emprender? Creer que un negocio propio es solo cuestión de tener una idea brillante que conducirá al éxito, es más o menos la tarea del tonto. Y como dicen por allí, el tonto trabaja doble. Muchos que empiezan creyendo que emprender es fácil, acaban fracasando en poco tiempo por no saber adaptarse a los cambios, a los sube y baja que plantea este camino y sobre todo, al desorden que implica no tener unos objetivos claros. Son muchos los que se pierden en la falsa felicidad de «ser tu propio jefe». Emprender significa cubrir muchos aspectos desconocidos por los empleados. Los emprendedores deben cubrir el puesto de gerencia, producción, planificación y comunicación de una empresa, más en estos tiempos en los que se necesita presencia en las redes sociales para crecer. Los negocios sin quieren sobrevivir en el mundo actual tienen que tener buen posicionamiento web, presencia en redes sociales, una buena atención al cliente y un producto de calidad que ayude a diferenciarse de los demás. En un principio todo eso será tarea del emprendedor, lo que supone un trabajo arduo y nos siempre satisfactorio. Las tareas que hacen muchos, recaerá sobre una sola persona. Entonces es evidente que para ser emprendedor, hay que aprender a administrar el tiempo y la tareas para ser productivos. Porque sí, no se trata de ser «más productivos» sino de aprender a serlo de manera eficaz y con métodos que realmente funcionen. ¿Cómo se aprende a ser productivo? Tidytoc nació a raíz de esta gran interrogante ¿Existirá un método realmente eficaz que conduzca a la productividad? Nuria con su experiencia demuestra que sí es posible. Ejerciendo su profesión como ingeniera y siendo emprendedora, lleva una vida dual que le obliga a estar atenta a las tareas del día a día. Todo eso, sin descuidar o dejar de lado su vida personal. Lo mejor es que al ser emprendedora sabe el reto al que se enfrenta. A los días geniales en lo que todo sale a dedillo y también los días nublados donde el síndrome del impostor hace de las suyas, sumiendo al emprendedor en dudas y malos ratos. Quién mejor para enseñar cómo aprender a ser productivo sino alguien que tuvo que aprenderlo y que ha pasado por las mismas batallas que implican iniciar un negocio. Entre algunas de las ideas que Nuria plantea a través de sus formaciones en Tidytoc está su lema principal «No trabajes más, trabaja mejor» y esa es una realidad arrolladora. Gran cantidad de emprendedores se frustran y hunden en la premisa «estoy ocupado, no tengo tiempo para nada» sin darse cuenta que eso es el estrés y la ansiedad hablando por ellos. Siempre hay tiempo y lo hay porque se puede aprender a sacar provecho a las jornadas de trabajo 8 o 10 hrs. diarias y realizar todas las tareas sin tener que tomar horas recreativas, personales y/o familiares para culminar un trabajo a medias. O al menos no se hará de esto una práctica constante porque también es cierto que en algunos momentos será inevitable. ¿Cómo aprender a ser productivo con Tidytoc? Las personas tienden, de manera errada a dejarle a la memoria el gran trabajo de recordar todas las cosas que hay por hacer. Sí, aunque la mente humana es un órgano prodigioso que es capaz de almacenar gran cantidad de información, no es recomendable dejar todo a la memoria. Cuando una persona se encuentra bajo mucha presión o momentos de angustia, tiende a pasar por alto muchos detalles que en condiciones normales habría recordado con facilidad. Aprender a gestionar una agenda y organizar las tareas, no solo representa una manera sencilla de liberar a la memoria de la pesada carga de tener que recordar todo, también es una forma eficaz de mantenerse enfocado. Tener previamente organizado las cosas por hacer, ayuda a gestionarlas con mayor rápidez y eficiencia. Lo que sin duda ayuda a ahorrar tiempo valioso. Así se aprende en Tidytoc, desmontando ideas preconcebidas y prácticas erradas que llevan a la improductividad. Alguna de ellas ya se mencionaron y otra, si se quiere la más importante, la idea que ser emprendedor implica no tener tiempo libre para nada y ser multitasking. Nada más alejado de la realidad. Intentar hacer muchas cosas a la vez, solo genera retraso, errores y más momentos para la procrastinación. Nuria desde su experiencia y con herramientas gratuitas y fáciles utilizar, asesora a emprendedores y freelancers para enseñarles a administrar su tiempo y agenda para el cumplimiento de las tareas diarias. Ser productivo es saber que el tiempo alcanza para todo con buena organización y métodos. Hoy se tiene a disposición gran cantidad de recursos digitales para organizarse, en Tidytoc se presentan los mejores y se enseña desde lo más básico hasta lo más complejo. Si quieres de una vez por toda aprender a ser productivo, sin excusas, por el bien de tu negocio y sin morir en el intento… visita la página web www.tidytoc.com y recibe la asesoría que tanto buscas. Todo en un solo lugar.
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