Omara Portuondo: canta para todos
Cuando descubrimos a Omara, en su lejanía: tema interpretado además para la cinta que lleva su nombre, ya la habíamos escuchado en otros temas, y en varios momentos de su vida artística.
Ya había pasado por el cuarteto de las D’ Aida, en la cual toma calibre como cantante, y se consolida en ese grupo pasando por las estelares enseñanzas de Aida Diestro, pero ya Omara era Omara cuando llegó allí.
Después del triunfo de la revolución, y decidida a comenzar su figura como solista, consagrada al filing, Omara comienza una nueva etapa en su vida, su nombre interpreta canciones como: Por los andes del Orbe de Tania Castellanos, y La era está pariendo un corazón, en el cual adquiere prestigio por cantar de otra manera, y en la que gana premios internacionales de interpretación.
Ella siempre fue esa cantante sencilla, a la que siempre ha podido llegar más allá, pero a la que le faltó un buen representante.
Disfrutamos de su voz escuchando los temas de Adalberto Álvarez, como sonera, y también los de Alberto Vera: Lo que me queda por vivir, Amigas, y otros temas que bien nos ha hecho de Omara, esa artista que tiene una bella voz, y a las que a todas les ha dado el mismo entusiasmo por cantar.
El Giro de 180º grados de Omara, ha sido su buena idea de junto al: Buena Vista Social Club, el de recrear obras que fueron ya ejecutadas por Merceditas Valdéz, y otros cantante de época, y por ella mismo hace bastante tiempo atrás, que en recreaciones de esos temas en su voz, repercuten en altos quilates su vida artística.
La gran cantidad de premios internacionales, así lo reconocen.
Nada le ha faltado en su carrera, solo el mismo tesón, la misma sencillez, y la misma modestia, que la hace MÁS grande, y mejor artista.
Pudiera reconocer, que en su voz, hay temas muy bellos, como es: Gracias a la Vida, o las interpretaciones de temas de Juan Almeida, y otos compositores.
Cuando la vida busca un momento para amar, o cuando busca una bella voz, una bella melodía bien en cassette, o en disco de acetato, o disco compacto, o DVD, no importa la tecnología, en Omara siempre hay una buena y excelente cantante, pero será siempre ella, la gran artista sencilla, la de pueblo, no otra, no aquella que se fue del país para buscar fama en el exterior, sino que con su trabajo, tesón y prudencia, ha sabido consagrase al arte de Cuba, para ser lo que ella es: OMARA de CUBA, la OMARA de los bellos tiempos, la OMARA de la música cubana, y bien cubana, la OMARA de hoy, de mañana, y de siempre.
VIVAS A OMARA, éxitos en su carrera, y recuerda siempre a los que modestamente te han ayudado a conseguir el éxito, de una manera u otra.
Para complacerme solo desearía oír en tu bella voz, un tema antológico: Angelitos Negros. VIVAS A OMARA PORTUONDO.

Arq. Guillermo Morán Loyola.





































Registro automático