Prepararse para el verano: cuidados preventivos

Con la llegada de la primavera son muchas las mujeres que empiezan a preocuparse más por su belleza e imagen. Los kilos de más, la baja forma, la alimentación o las cremas se vuelven “obsesiones” para algunas en los meses previos al chapuzón en la playa. Lo ideal hubiera sido preocuparse por la salud y la forma física durante todo el año, pero si no ha podido ser así, tranquila, hay unos cuantos consejos de belleza para poder alardear de tipo bajo el sol sin tener que pasar ningún calvario.

Lucir una piel sana y saludable ha sido siempre el sueño de cualquier mujer, pero el tabaco, las toxinas, y el propio sistema hormonal pueden obstaculizar ese ideal. Es necesario mentalizarse que la piel necesita máximo cuidado, limpieza e hidratación y nutrición. Además, la constancia puede ser un gran aliado para ver los mejores resultados. Beber dos litros de agua al día, un peeling cada semana, retirarse el maquillaje de la cara antes de acostarse e hidratarla con cosmética para tal fin, son reglas básicas que funcionan y aumentan el resplandor y mejoran el estado del cutis.

En cuanto al cuerpo, apuntarse al gimnasio puede ser otra posibilidad para recuperar la forma física, pero no tendrá el efecto deseado si sólo van a ser dos meses. No hay nada peor que "machacarse" el cuerpo por un corto período de tiempo para después abandonarlo. Mejor apuesta por largas caminatas tres o cuatro veces a la semana, subir a pie las escaleras, e intentar realizar pequeños ejercicios mientras realizas tareas cotidianas. Una dieta equilibrada reduciendo el consumo de alcohol, bebidas gaseosas y grasas; aumentando las verduras, frutas, el pescado y proteínas magras, te ayudará a mantener a raya los famosos michelines.Y qué decir del castigado cabello. En verano hay que tener máxima prevención: el agua del mar, el cloro de la piscina y el sol resecan el pelo y lo desvitalizan. Por ello siempre es recomendable acudir a la peluquería para sanear las puntas y nutrición una vez a la semana con mascarillas. Una vez en la playa protégelo con filtros solares y algún sombrero o gorra para minimizar los efectos negativos.

Por último, si tienes algo más de tiempo y dinero, existen tratamientos estéticos como la electroterapia, la mesoterapia, la hidroterapia o el drenaje linfático que actúan directamente sobre esas zonas de tu cuerpo que quieres perfilar. Aunque lo más recomendable es acudir a un especialista para que te aconseje el más idóneo para tus objetivos.

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