Admirar, Aceptar y Creer para triunfar
Cuantas veces habremos visto películas con cuentos de héroes y heroínas que nos hicieron suspirar, idolatrar y venerar.
Si observamos un poquitito a la humanidad, si leemos un poquito de historia y tratamos de entender otro poquito de las diferentes religiones, entonces te darás cuenta de que de venerar, idolatrar y fanatizar se trata el argumentos de muchos y el motivo de las tantas divisiones.
El conocer los pasos de algún héroe, sabio y maestro de la historia es totalmente enriquecedor siempre y cuando también sepamos que “los caminos” de los otros son grandes ejemplo que nos demuestran que “si se puede”, que como ellos marcaron y diseñaron un sendero para alcanzar “sus propias metas”, nosotros también podemos hacerlo y marcar “nuestro propio sendero”.
Ahora cuando conocemos los pasos de alguien que ha llegado al triunfo, al entendimiento, a la sabiduría y pensamos que esa es “la única verdad”… entonces no convertimos inmediatamente en veneradores fanáticos que por creer que solo existe una respuesta a la verdad dedicamos inútilmente toda nuestras energías en defender esa creencia, cuando deberíamos canalizar nuestro tiempo en construir, crear y aceptar que en todos se encuentran diferentes realidades, con diferentes verdades.
La admiración a los grandes héroes es sumamente sana, natural y orgánica que nos regala el aliento de creer en millones de posibilidades. Reconocer la divinidad de los grandes maestros nos ayuda a reconocer nuestra propia divinidad.
La veneración por otro lado es separatista y disminuye la capacidad de reconocer nuestras propias capacidades, nos siega en el cuarto oscuro del fanatismo que a su vez no nos permite ver ni reconocer los diferentes matices de las verdades.
Esta es la historia de nuestra humanidad “tratar de defender lo indefendible” por no saber creer en nosotros mismos, decidimos mal interpretar las verdaderas enseñanzas, creyendo en los otros antes de creen en nosotros mismos.
Cree en ti mismo primero para poder creer en los demás, aprende amarte a ti mismo para poder amar a otros…esto lo han dicho todos, todos, todos los maestros de todas las religiones.
Si tu realmente estas dispuesto a crecer, triunfar y convertirte en tu propio héroe, entonces debes sacarte las vendas del fanatismo y dejar de perder el tiempo como lo vienen perdiendo hace mucho tiempo gente que padecía y padece de ignorancia crónica.
Escucha, admira y aprende de los grades ejemplos, cristianos, judíos, musulmanes, hindúes, budistas, taoístas y otros…
Cree en ti mismo, reconoce tu divinidad, traza tu propio camino, Ad-Mira todo absolutamente todo lo que hay a tu alrededor y encontrarás los grandes aprendizajes y los verdaderos caminos de los triunfos.
Namaste Melina Lunarello
http://www.ElArbolDeLaVidaOnline.com http://melinalunarello.blogspot.com/

La simple pasion de Melina Lunarello es despertar la totalidad de la potencialidad intelectual y espiritual de aquellos que asi lo deseen.





































Registro automático