Botox: una toxina para la belleza
Botox es el nombre comercial de una toxina producida por la bacteria Clostridium botulinum. En grandes cantidades, esta toxina puede causar botulismo (intoxicación alimentaria bacteriana) A pesar del hecho que una de las complicaciones más graves del botulismo es la parálisis, los científicos han descubierto una manera de utilizarlo para beneficio humano. Pequeñas cantidades diluidas pueden ser directamente inyectadas en los músculos específicos causando un controlado debilitamiento del músculo.
La FDA (U.S. Food and Drugs Administration) aprobó el uso de esta sustancia en la década de 1980, a partir del descubrimiento de las bondades del Botox para ayudar en casos de enfermedades como el blefaroespasmo (parpadeo incontrolado) y estrabismo.
La inyección de botox es junto con la liposucción y el aumento de senos, una de las cirugías estéticas más demandadas. Eso sí, antes de realizártela, entérate de cuánto cuesta una liposucción.
¿Cómo funciona el Botox?
El Botox bloquea las señales entre los nervios y los músculos. El músculo inyectado ya no puede contraerse (causando el pliegue) y se relaja (suavizando el aspecto)
Se utiliza con mayor frecuencia en las líneas de la frente, las “patas de gallo” (líneas alrededor de los ojos) y las líneas de expresión. Las arrugas causadas por el daño solar y la gravedad no responden al Botox.
Los efectos del Botox duran de cuatro a seis meses. Como la acción muscular retorna gradualmente, las líneas y las arrugas comienzan a reaparecer. Las líneas y arrugas tienden a reaparecer menos severas después de repetidos tratamientos, porque los músculos están siendo entrenados para relajarse.
La inyección de botox o unos minutos y no se requiere anestesia. La toxina se inyecta con una aguja fina en los músculos específicos causando sólo una molestia leve. Por lo general, toma de tres a siete días para tener pleno efecto.
Efectos secundarios del Botox:
Moretones temporales (efecto secundario más común)
Puede padecer de dolores de cabeza, que desaparecen en un plazo de 24 a 48 horas. Sucede con poca frecuencia.
Un pequeño porcentaje de pacientes puede desarrollar párpado caído. Esto generalmente se resuelve en tres semanas.
Un mínimo porcentaje de personas pueden presentar parálisis facial. Cuya duración puede extenderse hasta que el cuerpo absorba la toxina.
Recomendaciones:
No permita que una persona sin grado de especialidad en medicina estética le aplique Botox. Es una sustancia tóxica, que mal aplicada puede ocasionarle repercusiones graves.
Es mejor evitar el alcohol al menos una semana antes del tratamiento.
La aspirina y antiinflamatorios deben interrumpirse dos semanas antes del tratamiento.
Las mujeres embarazadas o lactantes no deben usar Botox.






































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