¿De qué manera manejas el automóvil de tu vida?

Cuando manejas tu automóvil, ¿te la pasas mirando el espejo retrovisor?

Te hago esta pregunta porque la mayoría de las personas viven sus vidas mirando el pasado. Ya sea culpándose de algún acto que hizo, o de algo que dejó de hacer en un momento dado. O se recuerdan de lo felices que eran en cierto momento de sus vidas.  Tal vez pensando “que hubiera pasado si… hubiese hecho esto o no hubiese hecho esto otro…”.

A todo esto yo lo comparo como si estuvieses manejando tu automóvil mirando la mayoría del tiempo a tu espejo retrovisor. ¿Te imaginas?

¿Qué ocurre cuando manejas tu automóvil, y te la pasas mirando el espejo retrovisor?

■    Pierdes el control del volante

■    Manejas  inconcientemente, o sea en automático

■    Puedes causar un accidente al no enfocarte hacia al frente

■    Podrías perder la salida de la avenida hacia donde te diriges

Cuando te la pasas mirando el espejo retrovisor, no enfocas tu atención hacia adelante, o sea, hacia donde te diriges. De la misma manera, nos ocurre si nos la pasamos pensando en nuestro pasado, sea cual sea la razón. Ya sea para recordar cosas buenas o cosas no tan buenas.

Además, cuando manejas tu auto mirando el espejo retrovisor podrías causar un accidente,  lastimarte o lastimar a otras personas, ¿verdad? Y lo peor de todo es que te estás perdiendo de las maravillas que están pasando justo en el presente, pasan y no te das cuenta. Y ni se diga del horizonte hermoso que tienes delante de ti y que pronto también pasará y será parte de tu pasado. ¿Vale la pena esto?

Así que, mantente pendiente de cómo estás manejando tu automóvil, mira solamente el espejo retrovisor para tomarlo de referencia, para reconocer que está allí, pero enfócate hacia adelante. Mantén las manos bien puestas en el volante de tu vida. De modo que te dirijas a tu destino sano y salvo.

Es de tu entera responsabilidad mantenerte presente y consciente mientras manejas el auto de tu vida. No dejes que un espejo retrovisor te distraiga, para que puedas disfrutar la ruta y disfrutar del paisaje.

¡Qué la luz del universo te guíe y te acompañe siempre!

Un abrazo,