Cómo dos relojes de mujer atrajeron la suerte a sus vidas

Esta historia habla de dos mujeres. Una de ellas se llamaba Laura. Una mañana lluviosa, mientras se disponía para ir al trabajo, abrió su buzón y encontró un paquete. Extrañada, lo abrió y encontró una nota y un regalo envuelto con un lazo rojo.Laura leyó la nota: “Aprovecha el tiempo que te queda”.

Laura se asustó. Abrió el regalo y encontró un reloj Fossil. ¿Qué significaba todo esto? No era su cumpleaños, ni esperaba ningún regalo. Pero lo que más le inquietó fue aquella nota. ¿La estaban amenazando? ¿Su vida corría peligro?... ¿Cuánto tiempo le quedaba? No pudo evitar irse al trabajo preocupada y con la idea de que probablemente alguien le siguiera.

Mientras tanto otra mujer, Sofía, bajó de su piso en la 2ª planta para llevar a los niños al colegio. Llegaba un poco tarde, pero observó cómo de su buzón sobresalía lo que parecía un paquete. En ese momento recordó que había olvidado ponerse uno de sus relojes de mujer que ella coleccionaba. Aún así quiso entretenerse en abrir el buzón.

Curiosamente Laura y Sofía recibieron la misma nota y los mismos relojes Fossil de mujer. En cambio Sofía tuvo una reacción muy diferente: ¿Cómo habrían sabido que coleccionaba relojes? ¿Su marido habría querido gastarle una broma?...Mientras iba al colegio a llevar a los niños, Sofía pensó en la inscripción de la nota: “Aprovecha el tiempo que te queda”. De repente se dio cuenta de algo importante: No importaba quién hubiese enviado el paquete. Aquél mensaje contenía una gran verdad.

Entonces Sofía, después del colegio, se fue a trabajar con una gran sonrisa. Alguien se había encargado de recordarle lo importante que es vivir con intensidad y alegría. Sofía pensó: “El tiempo que me queda” significa que aproveche con amor e ilusión cada momento porque eso me traerá lo mejor de la vida.Y de repente sucedió algo impactante. Laura estaba tan preocupada por la nota recibida que empezó a comportarse de manera extraña.

No hablaba con nadie en el trabajo, se mostraba irascible y pronto su trabajo empezó a ser menos productivo. Además, cuando caminaba por la calle, miraba hacia todos lados con el fin de encontrar a alguien que decidiese acabar con “el tiempo que le quedaba”. Al cabo de una semana, Laura fue despedida del trabajo. Lamentablemente, mientras estaba inmersa en la mala suerte que le había traído aquella nota, Laura se distrajo y fue atropellada por un coche. Murió.

Sofía, haciendo caso de la nota empezó a aprovechar el tiempo. Su trabajo era tan productivo que recibió un ascenso. Los niños la adoraban y todo fue genial en su vida. La suerte no existe. Todo aquello en lo que te enfoques crecerá. Si te centras en el lado negativo de las cosas, eso es lo que atraerás a tu vida… Y viceversa. Por tanto, utiliza los mensajes que te envía la vida para tu mayor bien.