Un tiempo de puertas abiertas
Apocalipsis 3:20: “He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo”
Yo sé que a usted no le gustan las apuestas. A mí tampoco. Pero si me gustaran, apostaría con los ojos cerrados a que este va a ser un año de puertas abiertas, para la vida suya, la de su familia y, en general, para su comunidad. ¿Que de dónde y cómo he imaginado todo esto? Bueno, en primer lugar permítame decirle que no tengo una bola de cristal ni creo en adivinaciones, pero sí poseo una guía de futuro muy segura y en estos días, al reflexionar y al consultarla he llegado a la conclusión de que se ha iniciado un tiempo muy bueno para la gente sencilla, humilde, creyente y obediente…como usted y yo.
Estos días en las tertulias, las reuniones y las jornadas de estudio de La Biblia (mi guía de futuro) he aprendido lecciones maravillosas de un texto que he decidido regalarles a todos mis amigos y, a personas que como usted, está pensando en un proyecto de vida digno para sí mismo y para su familia. Lo encontré en el libro del profeta Isaías, en el versículo once del capítulo 60 (Isaías 60:11, para decirlo en un lenguaje más familiar para quienes con frecuencia consultan pasajes bíblicos). Textualmente dice: “Tus puertas estarán de continuo abiertas; no se cerrarán de día ni de noche, para que a ti sean traídas las riquezas de las naciones, y conducidos a ti sus reyes”
Este horizonte, mostrado inicialmente al pueblo de Israel es bellísima, pues nos habla de un tiempo de puertas abiertas, es decir, de logros, de conquistas, de realizaciones y de cumplimiento de las bellas y abundantes promesas de Dios para nuestras vidas. Pero además de que las puertas estarán abiertas, tenemos el ofrecimiento de Dios en el sentido de que éstas no se cerrarán ni de noche ni de día y de alguna forma compartiremos las riquezas de las naciones.
¿Y qué tenemos que hacer para volvernos partícipes de esta sin igual oferta de parte del dueño del oro y de la plata, de los cielos y de la tierra?
Bueno, la verdad no es mucho lo que podamos hacer porque Dios en su infinita misericordia ha actuado por nosotros y nos tiene en sus planes; pero el mismo libro del profeta Isaías nos da unas recomendaciones sobre la forma en que debemos prepararnos para recibir todo lo que Dios ha decidido darnos:
“Ensancha el sitio de tu tienda, y las cortinas de tus habitaciones sean extendidas; no seas escasa; alarga tus cuerdas, y refuerza tus estacas.
Porque te extenderás a la mano derecha y a la mano izquierda; y tu descendencia heredará naciones, y habitará las ciudades asoladas”. (Isaías 54:2-3)
Ensanchemos nuestra tienda: es decir, nuestras expectativas respecto a lo que el porvenir nos trae gracias a la intervención generosa y magnánima de un Dios grande y poderoso que es feliz al concederle a sus hijos lo que necesitan para ser felices: vida, bienes materiales, salud y, por sobre todas las cosas, la salvación y la vida eterna, porque, Él nos amó de tal manera que ha dado a su Hijo Unigénito para que todo aquel que en él crea no se pierda más tenga vida eterna.
Preparémonos desde ahora para un tiempo de puertas abiertas en nuestras vidas. Y esperemos en el señor, con los brazos abiertos y el corazón dispuesto.
Alejandro Rutto Martínez es un destacado escritor italo-colombiano que ha dedicado una buena parte de su vida a la enseñanza sobre temas de ética y liderazgo en congresos, seminarios y universidades. Es administrador de empresas egresado de la Universidad de La Guajira y especialista en Administración de programas de Desarrollo Social en la Universidad de Cartagena. Especialista en Orientación Educativa y Desarrollo Humano en la Universidad El Bosque y Especialista en Docencia Universitaria en la Universidad Santo Tomás. Actualmente cursa la maestría en Ciencias de la educación en un convenio entre la Universidad de Matanzas (Cuba) y la Universidad de La Guajira (Colombia). Es autor de seis libros y de numerosos artículos que se pueden leer en www.articulo.org y en su página http://www.maicaoaldia.blogspot.com/. Puedes contactarlo a través del correo electrónico: alejandroruto@gmail.com o seguirlo en twitter: @Alejandrorutto

Lo bueno que vaya a hacer hoy, hágalo bien, por usted, por su familia y por su país. ¿Ya leíste Maicao al Día?





































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