Como limpiar suelos vinilicos

Hoy en día es bastante común encontrarse con pisos que tengan suelos vinílicos, lo cual tiene tanto ventajas como algunas desventajas, pero estas últimas pueden reducirse considerablemente si se realiza un correcto mantenimiento, como por ejemplo realizar limpiezas periódicas evitando que se acumule demasiada suciedad.

A pesar de que los suelos vinílicos  pueden parecer sencillos de limpiar, hay ocasiones en las que la suciedad puede convertirse en una pesadilla, dependiendo de la clase de mancha o suciedad que haya.

La suciedad más resistente en los suelos vinílicos necesita de un trabajo duro y no todos los limpiadores son aptos para esta clase de suelo, especialmente aquellos productos químicos o abrasivos, donde algunos pueden llegar a dañar los suelos, razón por la cual hay que buscar productos adecuados, buscando asesoramiento de un experto o siguiendo las instrucciones de cada uno o las recomendaciones del fabricante de estos suelos.

¿Cómo limpiar correctamente los suelos vinílicos?

Es muy importante mantener estos suelos siempre limpios de polvo y cualquier otra clase de suciedad, especialmente si entre las baldosas hay un surco profundo, lugar donde suele acumularse bastante suciedad en la mayoría de los casos. Hacer una limpieza de manera periódica evitaremos que la suciedad se acumule entre los surcos o grietas.

Tanto los suelos vinílicos como las baldosas hay que lavarlas primero siempre con agua, primero de los elementos para eliminar la suciedad, aunque si queremos reforzar su acción podremos añadir una cucharada de detergente para platos o media taza de vinagre para acabar con la suciedad.

Para una máxima limpieza, especialmente con las manchas más resistentes, podemos agregar un pequeño tapón de amoniaco o un producto especial para limpieza de suelos vinílicos con base de amoniaco al agua caliente de un caldero. Lo que hay que hacer es dejar que actúe la mezcla durante unos cinco o diez minutos con lo que se ablandará y se eliminará la suciedad más fácilmente. En este caso hay que tener en cuenta que el amoniaco puede crear una película un poco aceitosa, por lo que después de esta operación hay que aclarar bien el suelo.

Otra alternativa para limpiar los suelos vinílicos  cuando estos tienen bastante suciedad es utilizar cloro blanqueador y agua en una proporción de uno a cuatro- Se echa por el suelo, se deja actuar unos 10 minutos y después hay que pasar una mopa bien seca.

Consejos a tener en cuenta

• Es muy importante tener en cuenta todos los productos de limpieza con los que contemos. No todos los productos son aptos para la limpieza de suelos vinílicos, por lo que hay que leer bien su composición y evitar aquellos productos que tengan agentes químicos muy abrasivos. Además los limpiadores químicos requieren de una buena ventilación porque se pueden acumular gases que pueden resultar nocivos.
• Si se tiene que usar un producto fuerte hay que tomar siempre todas las medidas de seguridad como guantes, mascarilla, etc.
• Es muy importante hacer que todas las personas de la casa se limpien bien los zapatos o cualquier otro calzado con el felpudo de la entrada, evitando al máximo que pueda entrar suciedad a los suelos vinílicos.