En canto todo el mundo puede tener buena voz

En canto, todos podemos cantar bien porque todos tenemos buena voz: si tienes voz par hablar, también tienes voz para cantar, salvo que quizás necesitarás un poco de ayuda.

Todos nacimos con buena voz: el primer grito al nacer lo atestigua, y si dudas de tu voz pídele a tu mamá cómo gritaste: en ese grito primal está toda la energía de tu voz al estado bruto. Pero hay mucha, y tu voz tenía en aquel entonces mucha potencia.

Entonces partimos con una buena voz y una respiración grandiosa, ventral, que sostiene perfectamente la voz. Luego por desgracia la vida nos suele reservar tensiones, disgustos, impactos fuertes, traumas, etc. Cada vez que algo nos ha superado, cortamos, tensamos algunas fibras musculares y bloqueamos algunos canales energéticos para no volver a sentir esa emoción, ese dolor, esa pena. Poco a poco nuestra respiración se acorta y se hace más superficial... y perdemos voz.

La mayoría salimos mal de la adolescencia a nivel vocal. Ya no tenemos nuestra voz, nos cuesta comunicar delante de otros y cantar puede ser algo complicado par algunos.

"No sirves para cantar". ¿Acaso te suena esa frase? Pues vaya falta de humildad cuando lo dicen, o vaya ganas de herir. La frase correcta sería "No tengo las herramientas para hacerte cantar bien". Pero cómo muy pocos tienen estas herramientas, se reconoce que NO se puede cantar bien si no tienes facilidad natural cómo algunos afortunados.

Cuando vas a clases de canto moderno, te enseñan técnicas para perfeccionar en parte lo que te queda de voz... pero no para rescatar y reconstruir toda tu voz. Porque allí se mezcla lo fisiológico con lo emocional, lo mental, y es mucho más sutil que lo que la mayoría hace.

Hay esperanza cuando encuentras un profesor de canto que ha superado similares dificultades en su voz y en general será alguien que se ha formado en cantoterapia además de canto, para poder abarcar la parte emocional y humana de la voz. Allí según el talento del profesor o de la profesora, podrás reconectar con partes de ti que ya no respiran, no vibran y no cantan, mermando la calidad de tu voz.

Tener buena voz pasa para mucho por estar ayudados por alguien que sabe desatar la ed en la que nos hemos dejado atrapar y que nos limita tanto a nivel personal, vital cómo vocal. Entonces descubres una nueva voz... y una nueva versión de ti.

Por suerte, hay este tipo de enseñanza, mezclando canto y cantoterapia, en muchas partes del planeta, con formaciones y enfoques distintos. Es cuestión de que busques, sientas si te resuena lo que la persona desprende, y que te lances par aprobar. Si no va habrás perdido algo de tiempo y dinero, y si funciona será un rencuentro muy feliz contigo mismo a nivel vocal y a nivel interior.

Podrás cantar a gusto con toda tu voz, y no canturrear de manera frustrante. Ya no habrá gallos ni miedo a quemarte la voz. Tu comunicación cambiará y estarás más alineado con tu propósito vital. ¿Ah que motiva? Venga, anímate y a buscar soluciones cerca de tu casa para liberar tu voz y reconquistar el placer de cantar.