El futuro del ser humano: astrobiología y exobiotecnología para la nueva era espacial

El planeta tierra experimenta desde hace tiempo graves deterioros: declinación del entorno ambiental y disminución en la calidad de vida por hambre, conflictos, pandemias, lo anterior derivado de una elevada densidad de población. De acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas, para el año 2100 se estima que la población mundial abarque un aproximado de 11.200 millones de personas con lo cual se multiplicarían exponencialmente los problemas e incluso surgirán nuevos.

De los datos anteriores surge la necesidad de generar una nueva disposición humana en el espacio. Recientemente, con los nuevos programas computacionales que tienen la capacidad de gestionar elevados volúmenes de información y efectuar cálculos más precisos, el ser humano ha sido capaz de analizar y predecir fenómenos más allá de sus fronteras y va en camino hacia la conquista del espacio, tal es el caso se la empresa SPACE X que recientemente ha logrado avances significativos en el ramo. Entonces el desarrollo de nuevos y mejores dispositivos que a la par generan conocimiento innovador para la formulación y comprobación de nuevas teorías nos permiten revelar los secretos del espacio exterior, logrando avanzar tecnológicamente.

Siendo que en un sistema solar, una estrella tiene una vida larga, la vida del ser humano es muy breve como para comprender todos los enigmas del espacio. A pesar de ello, los humanos, seres inteligentes y capaces de lograr sus objetivos haciendo uso de la ciencia como herramienta resolutiva, podemos prolongar nuestra existencia y favorecer nuestra expansión.

Por ello y para dar solución a las dificultades, hacemos uso constante del conocimiento científico en diversos ámbitos, como de la biotecnología innovadora (la ingeniería genética, la bioinformática, etc.) que promueve protocolos la supervivencia, así como de las tecnologías aeroespaciales, y con tales herramientas formuladas se puede trabajar para perpetuar su propia conciencia, con esto, las mentes brillantes serán capaces de vivir más para generar más conocimiento al servicio de la humanidad. La física y química modernas combinadas con la implementación de supercomputadoras e inteligencia artificial proponen paradigmas en los cuales lo imposible es ahora una posible realidad, generando una auténtica disposición para garantizar la vida, que irá de lo abstracto hacia lo tangible.

Además de lo anterior y desde una perspectiva axiomática, surgen nuevas áreas que permiten generar un conocimiento más innovador, como la exobiología, que es una rama de las ciencias biológicas que promueve el establecimiento de seres vivientes en sitios fuera de la tierra, actualmente se han identificado varios planetas aptos para colonización, entre ellos Ross 128 b y GJ 357d, los cuales poseen condiciones habitables. Con ello se propone a la “exobiotecnología” o biotecnología espacial como medio de solución a la problemática actual de escases de recursos por sobrepoblación y al deterioro casi irreparable que ello conlleva, lo cual produce constantes catástrofes biológicas que se pueden prevenir con una distribución equilibrada y optimizada de su población y la implementación de protocolos de ciencia avanzados.

Si los problemas económicos derivan de la falta de recursos o territorio se pueden buscar nuevos lugares habitables para que la raza humana se expanda y genere condiciones de bienestar en ambientes sistemáticamente similares a los de la tierra, logrando una mayor armonía. El reto es generar las condiciones que le permitan una expansión para su propio beneficio con una concientización de que la tecnología es la única vía asertiva para lograr estabilidad y prosperidad a largo plazo.