Carta a un entrañable amigo
CARTA A UN ENTRAÑABLE AMIGO
Amigo:
Es impresionante lo que siento al sentarme en la computadora y escribir algo. Es como si, se estuviera yendo parte de mí en estas letras, al pulsar cada tecla, las letras se van con las palabras y mis ideas a la computadora, las que luego viajaran a través del ciberespacio.
Quiero contarte algo breve acerca de mí, para luego entrar en el tema que nos interesa.
Mis estudios primarios y secundarios, los realicé en el Colegio “Externado Santo Toribio de Mogrovejo” del distrito del Rimac. Después de salir del colegio, me entusiasmó mucho la idea de ser Médico Veterinario, pero la música pudo más. Sin embargo nunca dejaba de leer libros de zoología y biología, o libros afines a la profesión.
Con el transcurso del tiempo, me intereso y me llamó mucho la atención, lo referente a cosas paranormales, y mas el asunto de lo famosos “platillos voladores” El primer libro que llegó a mis manos fue: “Yo visite Ganímedes” de Yosip Ibrahim. A lo mejor tienes conocimiento de el. Seria un poco extenso comentar sobre esto. Luego leí, “Y conocimos gente de otros mundos” de José Carlos Paz Corrochano, y también el libro de su hijo que escribiría mas adelante “Los Guías extraterrestres y la misión rama” de Sixto José Paz Wells. Te cuento esto porque tiene relación con el tema que tocaremos. Tiene mucha relación, porque por ejemplo Sixto Paz, en su libro, narra como los extraterrestres nos hablan de un ser superior, nos hablan de la vida después de la muerte, nos hablan también de la existencia del alma, (“que ellos también poseen”)
Para mí, en ese entonces un joven de unos 18 o 19 años, era algo fascinante. Me daba la impresión que la fe de la Iglesia Católica no se oponía a estas creencias o “experiencias” de estas personas. Todo tenía relación. También llegó a mis manos un librito titulado “La ciencia de la autorrealización” que su autor llamado con un nombre medio extraño para mi en ese momento “Bhaktivedanta Swami Pradhupada” hablaba de la existencia del alma, la reencarnación, la meditación y otros temas más. Entonces ya en mí, se fue abriendo más la inquietud de conocer algo más acerca de este tema, porque presentía que todo tenía relación.
Pero lo peligroso era y que gracias a Dios no caí en eso, fue cuando ya se estaba convirtiendo en una obsesión. En mi afán de buscar más, encontré un libro de titulo “Manual de experimentos parapsiquicos” de Martínez roca. En el cual te propone aprender a: “Conversar con la plantas”, “transmitir y recibir mensajes mediante la telepatía”, “grabar voces del más allá con un simple magnetófono” y otras cosas mas. Entonces el asunto iba para más, y podía caer en el espiritismo. Como te cuento gracias a Dios no fue así.
Lo bueno en mi, creo, es que siempre vi esto de una manera objetiva, analítica o científica, si se puede decir, sin tener la suficiente base de conocimiento requerida. Teniendo la certeza de no caer en el espiritismo, y en cosas como el uso de la “huija” seguí buscando libros, y encontré “Las voces de los vivientes de ayer” de: Gabriela Alvisi. En el cual dice entre otras cosas “La muerte no es más que un frágil diafragma, más allá del cual los “vivientes del ayer” continúan viviendo en un mundo espiritual, semejante al nuestro, conservando intacta su personalidad” presentando como prueba más de seis mil horas de grabaciones, la autora sostiene que no se requieren poderes extrasensoriales o mediúmnicos para escuchar las “voces” de personas muertas; basta una radio con grabadora para captarlas.
Un tema muy interesante con el que me encontré, y que tiene que ver mucho con nuestro asunto a tratar, es el de la vida antes de la vida. Me encontré con el libro titulado “Vida antes de la vida” de Hellen Wambach. Quiero transcribirte la contratapa del libro para que veas más o menos de lo que trata, no te me duermas. Acuérdate que esta es una lectura interactiva. Y dice:
VIDA ANTES DE LA VIDA es el extraordinario libro de la psicóloga Helen Wambach, que explora las fascinantes respuestas a las preguntas realizadas bajo hipnosis a 750 personas acerca de sus vidas antes del nacimiento. Tras dos años de estudios, la doctora llegó al conocimiento de que “el 90 por 100 de las personas que acuden a mi, reviven escenas de una vida anterior……
Estoy convencida de que ha llegado el momento de estudiar rigurosamente la posibilidad de la reencarnación. (Sigue la contratapa del libro, con estas preguntas):
¿Eligio Usted nacer?
¿Por qué eligió el siglo veinte?
¿Eligió su sexo para esta vida próxima? (y otras preguntas mas)
Otro libro que llegó a mis manos, y ya para cerrar esta casi larga lista de libros, (que dicho sea de paso tengo más en mi poder, pero ya no vienen al caso) es el libro titulado “La vida después de la muerte” del yogui Ramacharaka, titulado también “La tabla de la esmeralda” brevemente en la contratapa del libro, en un fragmento que quiero apuntar dice:
En este libro el universalmente conocido Yogui Ramacharaka, nos expone los fenómenos del más allá, según la profunda y esperanzada concepción oriental, llevando al ánimo del lector, que lo que llamamos muerte o destrucción de una forma material de vida es el preludio de la construcción de otra, y si dejamos que el alma hable por sí misma, nos dirá: “No hay muerte. Sólo hay eterna, sempiterna Vida”
Ahora quiero contarte algo ya personal, el testimonio de una persona adulta. Todo lo que leí en mi juventud antes de casarme, todo lo particular a este tema (porque como te digo el asunto te lleva a una y otra cosa más) déjame decirte franca y personalmente: No me llenaban. A mi me pasa algo muy extraño, cuando experimento algo; puedo percibir, (no se, si de una manera extra sensorial), si lo que estoy experimentando es falso o verdadero. Te cuento: Para mi entender, sí excite vida en otros mundo. Pero cuando veo fotos de dichos aparatos volantes, puedo darme cuenta que foto es falsa y cual es verdadera, porque lo siento. De las 100 fotos que vea solamente una me da escalofríos, y me da entender que es la verdadera. Igual, cuando leo algo, puedo sentir quien esta escribiendo tonterías y quien esta escribiendo lo que verdaderamente le ocurrió. También me ocurre lo mismo al ver imágenes en video. Es por eso que creo que Sixto Paz, quiso hacer negocio de la real experiencia de su padre, que en paz descanse.
Después de haber estudiado Teología y leer todos los libros que tenemos que leer para alcanzar esta meta, pude sentir que era verdad, y que era mentira. Puedo sentir cuando alguien me habla con la verdad, y que, ¡ojo!, no es su verdad; y esto es más impresionante todavía. Puedo sentir mi presencia como espíritu, y más alucinante todavía puedo sentir la presencia de Dios en mí. Claro alucinante en termino figurado, porque no es alucinación.
No creo, porque no lo siento, en la reencarnación, más si creo en que somos únicos e irrepetibles. “Creo, porque siento, y razono sobre lo que siento, y creo”. La teología me enseño a razonar sobre el hecho de fe, ubicarlo en el contexto y analizarlo, porque la fe se sostiene con la razón y la razón se sostiene con la fe.
Entrañable amigo mío. Si, entrañable porque tu amistad esta metida en las entrañas de mi corazón. Me preguntas algo que solamente lo puede responder uno mismos desde su propia experiencia. Te puedo contar mi experiencia si eso te satisface en algo. Esta vida es hermosa, y más hermosa será la futura. También me preguntas donde va todo nuestro conocimiento el día que dejemos este mundo. No se pero me da la impresión que quieres llevarme por la reflexión anterior a nuestra conversación. “Lo referente a la Historia”.
Es lógico que todo el conocimiento de una persona, si no se deja escrito y depositado en algún lugar, se lo lleva a la tumba. Es así como se hace la historia de una persona y de un pueblo, y porque no decirlo del mundo. Pero insisto. Mi historia debe ser una historia de constante superación, la historia de una persona que quería saber y conocer más y más.
Algo creo importante también de comentar, es lo referente a que nosotros siempre cuando nos sentimos acongojados por algo, nos hacemos estas preguntas. Yo también tengo un problema con tu comadre Adriana, que de repente te cuente mas adelante, abusando de nuestra confianza. Cada matrimonio es un mundo diferente, cada cual con sus problemas. Si quieres seguir compartiendo conmigo tus inquietudes en lo referente a este tema, siempre estaré presente para escucharte, o leer tu carta, para poder (no quiero decir aconsejarte), porque ese termino me parece como si estuviera diciendo “yo soy mejor que tu” yo diría mas bien para poder acompañarte, y juntos aprender a vivir lo que nos toca vivir.
Darío, amigo mío, no se si será el caso, pero no quiero que estés triste por ningún motivo, quiero que veas la vida, tal y como es, hermosa de vivirla, y piensa que siempre hay gente que nos quiere y nos estima tal y como somos, gente que está dispuesta a acompañarnos en nuestras penas y tristezas. Y ahora me toca a mí. Espero no haberte abrumado con mi carta.
Tu amigo de siempre
Andrés Arbulú Martínez.
Lima, lince 12 de Agosto del 2009
Andrés Arbulú Martínez
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