consejos para afrontar las crisis No. 10

Décimo: Contrate consultoría

La consultoría es la forma más rápida de acceder a conocimientos especializados y actualizados. Si usted no recurre a consultores especialistas en el tema de su interés, otros si lo harán, luego no se pregunte como lo lograron, si usted trabajó tanto con tan pocos resultados.

No confunda efectividad con actividad. Normalmente existen varias maneras de hacer las cosas, el resultado final puede ser similar, pero el proceso muy diferente, ese proceso es el que generalmente es costoso, si usted tiene un proceso mas costoso que su competencia para agregar al final el mismo valor, ellos llevarán la delantera. La consultoría le ayudará en todo aquello en lo que usted no es un experto y permitirá integrar su conocimiento y experiencia a un negocio exitoso, altamente eficiente y preparado para sacar adelante proyectos renovados a pesar de las crisis.

Revise su plan de negocios

Si no lo tiene asesórese y elabore uno, este constituye su guía de acción, le permite formular estrategias, definir y comunicar su cultura corporativa, definir claramente los objetivos de negocio, de esta manera sus colaboradores sabrán lo que usted propone y podrán ayudarle a lograrlo. Si ya hizo su plan de negocios, revíselo, vea como la crisis le afecta, que cambió, que cosas han dejado de ser viables y cuales nuevas oportunidades se abren, determine cual es la verdadera experiencia de su empresa o negocio y para que sirve esa experiencia, que productos o servicios pueden derivarse de esa experiencia, los cuales son sus nuevas oportunidades. Salga al mercado, vea que necesidades existen, proponga soluciones para esas necesidades, eso será un negocio con éxito garantizado, le aseguro.

Revise opciones, no se decida por una antes de haber considerado otras, estúdielas profundamente, déles una oportunidad, escuche a quienes tienen algo que decir sobre ellas, a favor o en contra, sopese sus argumentos, valídelos y vea que parte de ellos puede ejecutarse, si le es posible haga la prueba asignándoles recursos, mida y revise los resultados, vea que funcionó y trate de determinar las causas, vea que no funcionó y trate de determinar sus causas, haga las correcciones y vuelva a probarlo.

Su plan de negocios debe incluir un plan operativo y financiero, esto le permitirá determinar los recursos que necesita y podrá conseguirlos a tiempo, le permitirá identificar las tecnologías, los equipos, la gente que necesita y el tiempo en que los requiere, podrá estimar el flujo de fondos del negocio, las necesidades de financiación, las necesidades de capital, estudiar el mercado, sus competidores, sus oportunidades.

Reinvente su negocio

Vea que experiencias exitosas tiene, compruebe si siguen siéndolo, en tal caso apóyelas, pero manténgales plenamente controladas, recuerde que algo que fue exitoso puede dejar de serlo.

Revise sus líneas de negocio, analícelas independientemente, vea si son rentables, procure estudiar otras mezclas de producto, estudie las que no sean rentables y determine las razones por las que no lo son, trate de solucionarlas, vea la conveniencia de mantenerlas, venderlas o cerrarlas, estudie que tanto afecta a su negocio y no las mantenga solo por apego afectivo, en los negocios hay que ser práctico en cuanto sea posible.

Revise que otras cosas puede hacer, es posible que con los recursos que tiene pueda sacar nuevos productos o servicios al mercado en lugar de disminuir su actividad, en esta forma la estará aumentando y contribuirá a la recuperación. Pregúntele a su gente, déles oportunidad de presentar ideas y trate de probarlas, muchos de los grandes adelantos surgieron de emprendedores que los propusieron y empresarios que fueron capaces de capitalizarlos.

Pregúntese si lo que hace puede hacerse de mejor forma, no crea que ya todo está inventado, ni asegure categóricamente que maneja tecnología de punta, esta soberbia puede cegarlo para el progreso y evitar que contemple oportunidades y amenazas que otros si ven.

La tecnología es una mejora en la creación de valor agregado con menos consumo de recursos Por muy adelantado que esté en tecnología, hoy o mañana alguien podrá sorprenderlo, cualquier mejora por pequeña que sea puede a la postre significar ahorros grandes y ser la diferencia entre permanecer o cerrar.

Estudie a su competencia, vea que hacen bien, que hacen sobresalientemente y como puede aprender de ellos, por más que usted sea líder del mercado, no se descuide, el líder es precisamente el objetivo al que muchos apuntarán, si quiere seguir siéndolo debe mantenerse alerta, no menosprecie a sus competidores, seguramente usted mismo alguna vez fue una pequeña idea de negocio y véase ahora donde está, porque otros no habrían de lograrlo.

Sea creativo y estimule la creatividad de su gente, muchas de las soluciones son más sencillas de lo que parecen, muchas cosas se pueden resolver con poca tecnología, con mas creatividad que otra cosa. Recuerde que la base de la innovación es la creatividad, apúntele a ella y déjese ayudar, revise con cuidado las nuevas ideas, si son buenas y usted las deja pasar, ellas podrían llegar a la competencia. Usted no necesita ser experto en todo, para eso hay expertos a los que puede contratar por el tiempo que requiera y a un costo razonable, sin embargo usted si es un experto, no lo olvide, si ya tiene años de experiencia y ha logrado que su negocio crezca y permanezca algo está haciendo bien, no lo deseche solo por creer en expertos.

Aquí voy a contarle la anécdota de un campesino adinerado, al comprar una finca la llamó “acienda el ato”, por supuesto el notario le recordó que lo correcto era llamarla “hacienda el Hato”, el campesino se quedó mirando al notario y le dice, Doctor yo aciendas de estas tengo 40, cuantas Haciendas de esas tiene usted?

La consultoría solo opera sobre acciones, la inacción no es aceptable. No busque consultores para validar su inactividad, la consultoría solo es útil cuando se realiza sobre acciones propuestas para lograr un objetivo específico, no contrate expertos para que le propongan cosas si usted no está dispuesto a hacer algo para lograrlas, si permite que su camino esté manejado por el azar del destino, para ello no necesita consultores, necesita videntes o pitonisas. La buena o mala suerte estará ampliamente influida por la acción correcta o incorrecta, no culpe a la suerte de sus desaciertos, muchos de ellos hubieran podido evitarse con buena planeación y el seguimiento correcto, eso no es suerte es trabajo y el trabajo duro puede mejorar el resultado, y “cambiar la suerte”.

Por supuesto que hay algunas cosas en que el azar tendrá cierta participación, pero pueden preverse y si bien sus consecuencias físicas no pueden evitarse, su impacto económico si puede ser manejado. Usted no puede evitar que ocurra un terremoto y por más que trabaje para evitarlo es posible que sus esfuerzos no tengan éxito, pero ese riesgo puede trasladarse y asegurarse. En caso de que ocurra, usted habrá disminuido las consecuencias o al menos la mayor parte. El azar es precisamente el objeto del seguro, pero solo cuando el riesgo en caso de ocurrencia del siniestro tiene consecuencias negativas.

Confianza

En las crisis lo primero que se pierde es la confianza. Lo que hace que una vez declarada una crisis esta se profundice, no son los cambios mismos en la economía, sino los cambios en las decisiones de las personas, tomadas con base en la pérdida de confianza, esas decisiones producen efectos económicos y son ellos los que profundizan la crisis. Para que una economía se reactive debe ocurrir un aumento de la confianza en las personas, lo cual les permite tomar decisiones de compra o inversión que son las que hacen mover de nuevo la economía y ayudan a salir de la crisis.

Para salir de la crisis es necesario adoptar estrategias contracíclicas. El crecimiento contracíclico es impulsado esencialmente por la demanda, pero para que haya demanda se debe recuperar la confianza del consumidor y ampliar la base monetaria hasta un valor suficiente para financiar el consumo. Es por ello que las principales medidas económicas apuntan a bajar las tasas de interés y ampliar la disponibilidad de crédito, pero inicialmente esto tiene poco efecto porque la gente está cautelosa de lo que va a pasar, no tiene confianza y no cree que la solución funcione, y la banca no tiene confianza en la capacidad de pago de sus clientes para irrigar el dinero a la economía.

Por esto se torna importante todo lo que la iniciativa privada logre hacer. En la medida en que se genere empleo remunerado se irá activando la economía hasta un punto en que la banca empiece a participar en forma amplia con créditos blandos lo que estimulará el consumo masivo y por tanto el crecimiento económico a una escala más grande.

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