Las figuras masculinas en el tarot
La baraja del tarot egipcio cubre una amplia gama de arquetipos, o personajes, cada uno de los cuales tiene características muy complejas y definidas. El tarot, de una manera u otra, se las ingenia para con los arcanos, tanto los mayores como los menores, describir casi todos los personajes o situaciones por las que puede atravesar una persona. Así, si observamos los arcanos con detenimiento, podremos ver en ellos reflejadas las personas que nos rodean. La habilidad de quien sabe leer las cartas del tarot es poder atribuir el significado preciso de cada carta y su correspondencia con personajes de la realidad.
Es interesante estudiar cada uno de los arcanos del tarot, y ver a qué nos remite cada uno. En particular, llama la atención lo poderosa de las figuras masculinas del mazo del tarot gitano.
El Loco es el primer arcano del tarot, y es una figura femenina. Por lo general, los arcanos masculinos tienen más herramientas sobre los objetos del mundo que las femeninas. Las mujeres en el tarot son representadas como poseedoras de dones de riqueza, poder basado en la sabiduría o la posibilidad de percibir realidades más allá de lo evidente, la conocida intuición femenina. El Loco domina el mundo de lo material en base a actitudes reñidas con el sentido común. Es el típico personaje del tarot que procede a realizar acciones arriesgadas, pero sin medir bien las consecuencias, es quien da lo que se conocen como “saltos de fe”. Avanza sin saber qué le espera, pero el resultado es muy favorable, siempre sale bien parado. Es un personaje con suerte.
El Mago también es un personaje del tarot con poder sobre las cosas materiales, sobre las cosas del mundo, pero su poder se basa en su conocimiento, en la alquimia, la madre de todas las ciencias de la antigüedad. Contrariamente al Loco, avanza sabiendo muy bien qué le espera, manejando todos los hilos, como un químico sopesa cada elemento de una fórmula.
El Emperador, de las cartas del tarot es la representa la autoridad. Es la voluntad, la energía y el poder puestos al servicio de un fin último. Puede representar un protector poderoso que nos ayuda.
El Sumo Sacerdote, la carta del tarot que nos vincula con la divinidad, es quien media entre este mundo y el poder supremo. También puede querer hablarnos de dogma, de un cuerpo inalterable, que no debe ser modificado, aunque las condiciones externas cambien y sean dinámicas.
Estos son algunos arcanos del tarot que nos remiten a figuras masculinas. ¿A qué persona de su entorno puede reconocer en cada una de ellas?
Jesus Thompson
http://bit.ly/b6Chnj
tarotamigo10@yahoo.com






































Registro automático