Tarot: amigo y aliado

Muchos mitos y leyendas se han tejido en torno al tarot. Su misión de indagar en lo oculto, ya sea secreto o acontecimiento por venir, ha generado con el correr de los siglos una serie de temores y desconfianzas fruto del desconocimiento. Porque el tarot nada tiene que ver con la magia negra o las invocaciones demoníacas. El tarot es ni más ni menos que una herramienta para alcanzar el bienestar a través del conocimiento. Conocimiento de lo que nos rodea y lo que nos espera. Pero también autoconocimiento. Y conocimiento también para poder aprovechar al máximo las posibilidades que nos ofrece, reemplazando la imagen de un tarot oscuro por la de un tarot amigo.

Uno de los mitos que conspiran contra la imagen de un tarot amigo es el que dice que el mazo de tarot absorbe las energías de quien lo utiliza, y puede volverse entonces maléfico. Pero nada hay de verdad en esto. Es cierto que cada mazo puede absorber la energía de quien lo utiliza y de quienes lo han consultado, convirtiéndose en un mazo con historia y sabiduría. Pero jamás podría ser manipulado para alterar sus mensajes o hacer el mal. El espíritu mismo del tarot lo hace imposible.

Cierto es también que a muchas personas les cuesta pensar en un tarot amigo porque temen oír de la lectura de cartas una mala noticia que después los obsesionará y amargará sus vidas. Pero como señalábamos antes, el tarot transmite conocimiento. Y el conocimiento es poder. Que una carta sugiera la posibilidad de una traición, por caso, no quiere decir que la traición ocurrirá efectivamente. Quiere decir que están dadas las posibilidades para que suceda. Y que el tarot, amigo, desea advertirnos. Para que tomemos los recaudos necesarios para evitarla. O evaluemos si alguna de nuestras conductas está abonando el terreno para ello.

Es también para tener este espacio de introspección, para reflexionar sobre el mensaje de las cartas y para evitar obsesionarse con las posibilidades que guarda el futuro, que se recomienda no consultar el tarot demasiado a menudo. No porque las tiradas tengan, como se cree, la posibilidad de alterar el futuro. El verdadero tarot amigo sugiere, es cierto, cursos de acción para lograrlo. Pero sólo las personas tienen el poder de cambiar su futuro. Lo que se haga con los elementos que el tarot pone a su disposición, depende pura y exclusivamente de cada uno.

Jesus Thompson

www.TarotAmigo.com

Tarotamigo10@yahoo.com