Cerrando Etapas

“Llegó el verano y con ello la culminación de ciertos proyectos iniciados hace algún tiempo. Es momento de revisar hitos y reconocer méritos. ¿Por qué esperar a fin de año para hacer balance? Ahora, a punto de finalizar el MBA (Máster en Dirección General), culminando algunos procesos de coaching y concluyendo los talleres de auto liderazgo, tomo conciencia de los logros alcanzados paso a paso. Cumplí conmigo misma, serví de guía para escalar cumbres elevadas y compartí una maravillosa exploración hacia el interior de las personas. Hoy, con la mente puesta en el “cerrado por vacaciones”, no puedo evitar sentir nostalgia por lo que queda atrás, y sobre todo por quienes quedan atrás.

Así es la profesión de coach. Las personan llegan a nuestra vida y no logramos entender lo que nos aportan hasta que se marchan. Cada cual viene con su propio propósito, con su particular meta, o con su reto desafiante, y durante un tiempo le ayudas a vislumbrar el camino, a mantener la antorcha encendida, y a fijar el rumbo. Te sumerges en océanos diversos con riquezas inimaginables y tesoros olvidados, que con gran sorpresa los coachees (clientes) reincorporan a sus vidas. Y luego, con el sabor reciente a misión cumplida aún mezclada con salitre, haces reflexión sobre los aprendizajes adquiridos para transformarlos en experiencia. Cada persona nos enseña algo nuevo, cada etapa nos aporta algo nuevo. Y con esa nueva mirada afrontamos con esperanza e ilusión otros procesos para seguir buceando en aguas nuevas, venciendo los temores a lo desconocido y deshaciéndote de viejas creencias. Cada etapa que cerramos nos invita a vivir nuevas aventuras.

Aunque no todos los episodios de nuestra vida sean del color que quisiéramos, todos encierran alguna valiosa lección. Es posible que algunas de esas lecciones no tengan una aplicación clara e inmediata. Pero con el pasar del tiempo puede que encontremos la forma de sacarle partido, aunque solo sea en forma de sabio consejo a un/a amigo/a o a un/a hijo/a. Para exprimir esa vivencia y saborear su jugo es importante saber pasar página. Para ello, a veces es imprescindible reconciliarse con el pasado y aceptar las circunstancias, por muy adversas que éstas sean. Es importante recordar que nada es para siempre, que todo cambia, tanto lo que nos agrada como lo que nos desagrada. Por muy difícil que nos parezca hoy la vida, por muy altas que se eleven las metas, por muy hondo que estemos cayendo, siempre podemos abandonar el pasado y reconstruir nuestra vida. Para empezar de nuevo solo es necesario vencer el miedo.”

Coach Emma García