Disipar los mitos con respeto a las familias anfitrionas

La idea de quedarse con una familia anfitriona o de acogida, en particular una inglesa, parece que supone erroneamente que la comida sea horrible, la bienvenida y el trato poco calurosos y que la unica ventaja sea de carácter económico para la familia en cuestión.

He decidido disipar este mito.

Experiencia personal

Durante mi infancia en Hove (cerca de Brighton), East Sussex, mis padres acogían a estudiantes.  Me dí cuenta años mas tarde cuando estaba trabajando en una compañía que organiza cursos de idiomas en el extranjero, que mi familia era una de acogida.  Tanto mi hermana como yo disfrutabamos mucho cuando se hospedaban los estudiantes en nuestra casa y tenemos muchos buenos recuerdos de aquella epoca y de lo bien que se pasaba.  Eramos la típica familia anfitriona: 2 niñas pequeñas (yo tenía 5 o 6 años y mi hermana 7 u 8 años en aquella epoca), la madre de acogida, enfermera, en el caso de mi madre y padre ingeniero, y tambien teníamos un gato que era nuestro mascota muy querido.

Nos gustaba mucho observar las reacciones de los estudiantes en cuanto a nuestras costumbres, sobretodo si eran  muy distintas a las suyas.  Esto se notaba mucho en los estudiantes japoneses y los de Arabia Saudita.  También nos encantaba cuando los estudiantes compartían sus costumbres con nosotros.  A menudo los estudiantes japoneses nos preparaban platos típicos de su país y nos enseñaban Origami, el arte de doblar papel.  Muchas veces manteníamos el contacto con ellos por correo despues de volver a su país.  Me acuerdo cuando unos de nuestros estudiantes colombianos nos vino a ver despues de 2 años y se quedó en nuestra casa como si fuese un miembro de nuestra familia.

La experiencia para nosotros fue fantástica. Aprendimos mucho de nuestros estudiantes al igual que  ellos volvieron a sus países con unos recuerdos muy gratos.

Una variedad de opiniones

Al haber hablado con muchos estudiantes del tema de acogida y habiendo colaborado con muchas academias de idiomas en el transcurso de los años, el tema de la familia de acogida o anfitriona no parece haber cambiado mucho. El problema radica en la diferencia de opiniones entre los mismos estudiantes en cuanto a las familias de acogida. En varias ocasiones trabajando como agente para cursos de idiomas, se han dado casos de que dos estudiantes que no tienen ninguna relacion, han ido a la misma acadamia, han asistido al mismo curso e inclusive se han hospedado con la misma familia anfitriona y tienen experiencias muy dispares.  Un estudiante lo habra pasado muy bien y estaría encantado con su estancia en Inglaterra, mientras que el otro estudiante estaría poco satisfecho y le habra parecido una pesadilla su estancia en el extranjero. Este tema siempre me ha causado curiosidad.

La opción preferida para estudiar en el extranjero

Por experiencia, mantengo que el mejor alojamiento durante los cursos de inglés en el extranjero es el que ofrecen las familias de acogida.  Es muy poco usual que una familia de acogida lo haga simplemente por el beneficio económico.  Los que ofrecen sus casa de acogida siempre tienen unas habitaciones para sus huespedes y en muchos casos son personas cuyos hijos ya son mayores y se han ido de casa, y que disfrutan con la compañía de estudiantes jóvenes que vienen de distintos países y que tienen también distintas costumbres. Como anteriormente mencionado, puede ser una experiencia muy enriquecedora y grata tanto para el estudiante como para la familia anfitriona. Sin duda es la mejor manera de practicar el inglés fuera de las clases de la academia. Y es muy importante para los estudiantes españoles que quieren evitar el contacto con otros alumnos  españoles que residen en la zona. Tanto Hove como Brighton no son excepciones.

La reputación de las academias de inglés

Las academias no quieren colaborar con familias de acogida cuyos motivos son de caracter exclusivamente económicos porque repercute sobre ellas. Su principal deseo es garantizar el bienestar de los estudiantes dentro de las aulas y fuera de ellas. Todas las academias tienen una persona que se ocupa del alojamiento para los estudiantes y se asegura que las familias tengan una excelente reputación y un acuerdo duradero y positivo con ellas. Cualquier familia que haya dado una mala imagen a los estudiantes es automaticamente borrada de la lista.

En cuanto a la comida: Sé que mi madre, por ejemplo, no era la mejor cocinera del mundo.  Sin embargo, la comida que se le ofrecía a los estudiantes era sana, sencilla e inglesa.

¿Que experiencias has tenido con la familia de acogida? ¿Piensas que sería mejor tener otro tipo de alojamiento durante el curso para practicar el inglés fuera de las horas de clase?

Comparte tus opiniones aquí con nosotros.