Haga turismo en Mendoza: recorra la tierra del vino
Mendoza es la provincia que goza del mayor centro productor vitivinícola de toda Sudamérica. Más de 1200 bodegas del más alto nivel elaboran allí cerca de 10 millones de hectolitros por año del vino que ha llevado a la provincia ser famosa en en todo el mundo. Hay en esta provincia turismo, alojamientos, gastronomía, souvenirs, espectáculos y todo lo que se pueda imaginar alrededor de esta bebida fascinante, adorada por las más diversas culturas desde tiempos inmemoriales.
Desde el año 2005, la provincia de Mendoza figura en la Red Global de Trabajo Capitales del Vino. Distinguida por la misma entidad como una de las Capitales Mundiales del Vino, comparte el honor con ciudades de reconocido prestigio vitivinícola, como Bordeaux (Francia), Melbourne, (Australia), Porto (Portugal), Florencia (Italia), Bilbao y Rioja (España), Mainz – Rheinhenssen (Alemania), San Francisco-Valle de Napa, California (EEUU) y Ciudad del Cabo (Sudáfrica).
La producción vitivinícola mendocina se divide entre cuatro valles principales: los denominados valles Sur, Centro y Oeste, y el Valle de Uco. Todos ellos añade a la posibilidad de degustar vinos del más alto nivel la sorpresa constante de sus hermosisimos paisajes. Los valles vitivinícolas están abiertos en Mendoza al turismo durante todo el año, con itinerarios diseñados especialmente para disfrutar a pleno de la experiencia. Las principales bodegas de la zona reciben a los turistas con una atractiva oferta que conjuga catas, degustaciones de uvas, refinada gastronomía, paseos, excursiones a las plantas elaboradoras y algunos de los más atractivos alojamientos de Mendoza, los que se encuentran situados en el corazón mismo de los viñedos, en plena zona de montaña. Y para quienes busquen algo distinto, en contraste con las grandes bodegas, los pequeños productores de vinos y aceite de oliva abren las puertas de sus talleres para deleitar al turista con el artesanal encanto de los métodos de elaboración más antiguos y tradicionales.
En Mendoza, la oferta de hospedaje identifica por su calidad y confort, y las zonas de turismo vitivinícola no son la excepción: en el marco de las plantaciones de vides al pie de la montaña, bodegas, fincas, hoteles, cabañas, estancias y casonas antiguas invitan a deleitarse a un tiempo de la naturaleza en su estado más puro y de los refinados placeres de uno de los más celebrados productos creados por el hombre. El vino vive y late en los valles mendocinos como en pocos lugares del planeta.
Jorge Alberto Guiñazu
Turismo en Mendoza






































Registro automático