Superación Personal - Parte I
En este artículo me referiré a algunos pasos necesarios en busca de la superación personal. Y, cuando hablamos de superación personal nos referimos al mejoramiento que, en cada una de las etapas de nuestras vidas y, en los diferentes campos en que nos desenvolvemos, logremos a través del tiempo.
Sin que el presente artículo pretenda tener una connotación religiosa o teológica, es importante tener en cuenta que la superación personal del ser humano ha estado siempre en los planes de la Divina Providencia, entendiendo para los propósitos de este artículo, como Divina Providencia, según lo describe Wikipedia: “la supervisión, la intervención o el conjunto de acciones activas de Dios en el socorro de los hombres.”(1)
Y, ese propósito se ha visto revelado en la voluntad de la Divina Naturaleza, en cada una de las etapas o dispensaciones del hombre en la tierra y ha estado referido al bienestar del ser humano, como se lee en el Libro de Génesis, en la Biblia, en uno de sus versos, el cual indica: “no es bueno que el hombre esté solo” (2). El texto señalado resalta cómo, no es la Voluntad Divina, aquello que para el hombre no sea bueno, poniendo la Soberanía Divina las soluciones necesarias al alcance del ser humano. Sin significar lo anterior que tal propósito deba cumplirse en todas las personas de manera automática o como ley inquebrantable, sino que, más bien, existen leyes que es necesario cumplir para el logro del Propósito Divino y, como lo mencioné anteriormente, no estamos hablando de aspectos teológicos relacionados con una u otra religión, sino del bienestar general de la humanidad. Esta superación estaría referida al logro de los objetivos que conduzcan a la felicidad, la abundancia y, sobre todo, la paz del hombre y la mujer aquí en la tierra.
Tal superación equivale a sabiduría, inteligencia y amor. Como lo expresa Miguel Ángel Cornejo en uno de sus artículos, en el Blog “crecerenpositivo” (3): “la acumulación de sabiduría, es el camino a la superación”.
La superación personal implica cambios, tanto en nuestros pensamientos como en nuestras acciones. Solo cambiando nuestro estado mental, cuando éste está limitado o afectado por inhibiciones relacionadas con sus creencias, prejuicios, costumbres y reglas, podremos ver resultados que reflejen nuestra superación personal. (4)
Pero, ¿cómo facilitar ese cambio conducente a la superación que aspiramos y de la cual hablamos en este artículo? Enfocándonos en el cumplimiento de objetivos y metas y haciendo de ellas una obligación. Estas acciones estarán constituidas por aquellas que no son parte de nuestras rutinas, trabajos, o costumbres recurrentes. Lo anterior, por cuanto, o no hemos sido educados para ellas o, habiéndolo sido, las hemos ignorado en el tiempo, haciendo caso omiso de su importancia y beneficio en nuestra superación. También, podremos facilitar el cambio hacia nuestra superación, con una función inversa a la anterior, esto es, no haciendo o dejando de hacer, algunas prácticas que hemos venido realizando diariamente en nuestra vida.
Entre las “cosas” que podemos empezar a hacer de inmediato, como parte del cambio, podríamos citar:
1.- La lectura de obras importantes, tanto de conocimiento general como, relacionadas con la superación.
2.- El ahorro voluntario
3.- El ejercicio diario
4.- La capacitación en nuestro campo, sea oficio, trabajo o profesión
5.- Llegar puntualmente a nuestro trabajo, todos los días. Y, queda a la imaginación y experiencia del lector, el resto de la lista que se puede hacer en el logro de este propósito.
Y, por otra parte, entre las “cosas” que deberíamos dejar de hacer, como parte del cambio rumbo a nuestra superación personal, podría mencionar:
1.- No adquirir nuevas obras para la lectura, hasta tanto no hayamos concluido con la que estamos leyendo.
2.- No iniciar un curso o un seminario hasta tanto no haber terminado con el que estamos realizando. Es lo que llamamos, enfocarse en el objetivo. En aquellas personas que estamos dedicados, por ejemplo, al comercio electrónico, es muy común adquirir material nuevo una y otra vez, sin haber terminado de estudiar lo que hemos adquirido antes.
3.- No utilizar el crédito para la adquisición de productos que no constituyen una necesidad. Y, al igual que en el caso de las cosas que, conducen al cambio, podemos hacer, queda a la imaginación y experiencia del lector, cuáles más debería dejar de hacer, para el logro de su superación personal.
Las que estoy mostrándole aquí, son solo algunas ideas para que usted inicie con este proceso, rumbo a la superación personal y, no tengo la menor duda que el lector podrá determinar qué otras cosas hacer o dejar de hacer para lograr el cambio que le permita superarse como es debido. Le recomiendo, eso sí, que haga por escrito, una lista de esas cosas, con el propósito de que pueda monitorear sus logros. Además, debe comenzar por aquellas áreas o ámbitos de su vida en los que usted se desenvuelve y que quiere mejorar. Más adelante, podrá empezar su ejercicio, en nuevas áreas. Recuerde: El Mejoramiento Personal, es un proceso continuo, e implica, indefectiblemente, cambios en su vida.
Lo espero en nuestro próximo artículo
Publicado por:Félix Miranda QuesadaAdministrador de EmpresasContador Público AutorizadoLicenciado en DocenciaMaster En Administración Educativa
Fuente consultada:1.- http://es.wikipedia.org/wiki/Divina_providencia2.- La Biblia: Génesis3.- http://crecerenpositivo.blogspot.com/2009/10/leyenda-hindu.html 4.-
Compártalo con sus amigos
Félix Miranda Quesada: Administrador de Empresas, Contador Público Autorizado, Licenciado en Docencia, Máster en Administración Educativa
Cursos Presenciale en Costa Rica
Félix Miranda Quesada Consultor de Negocios Contador Público Autorizado http://www.grupomiranda.co.cr Te espero en nuestra empresa para que crezcamos juntos: Félix Miranda Quesada http://www.felixmiranda.com
Registro automático