Tipos de Hipoteca
Tras los efectos de la denominada crisis subprime, los bancos han endurecido notablemente sus políticas de concesión de hipotecas. Esto no quiere decir que no se concedan hipotecas, pero sí que los requisitos y avales que ahora piden son mucho más exigentes. Es por ello que a la hora de contratar una hipoteca debemos de tener en cuenta varias cuestiones.
Una de las más importantes es saber que existen un gran tipo de modalidades, y que cada una tiene sus ventajas y peculiaridades. Cuanto más sepamos del estado del euribor hoy y mas sobre los tipos de hipotecas más fácil será organizarnos. En tiempos de crisis hay que estar preparados.
Estas son algunas de las hipotecas más frecuentes:
• Hipoteca de interés fijo: Son las más estables y seguras. Su ventaja radica en que estaremos pagando la misma tasa de interés durante la duración total de la hipoteca, que normalmente oscila entre 20 y 30 años. Aunque el tipo de interés suele ser más alto, logramos mantener las cuotas mensuales. Este tipo de hipotecas suelen tener mayor éxito cuando la coyuntura económica es incierta, como es el momento actual.
• Hipoteca de interés variable: Con este tipo pagaremos menos cuotas mensuales mientras los tipos de interés se mantengan bajos, pero si estos aumentan también subirá nuestra hipoteca. Una de sus ventajas es que las tasas de interés y los pagos en sus primeros meses, o incluso años, suelen ser menores a los de una hipoteca de interés fijo.
Esto te permite calcular hipotecas baratas y pagar una vivienda de mayor costo ya que la tasa de interés inicial será más baja. El plazo suele ser hasta de 30 años, aunque hay casos de entidades ques conceden incluso hasta a 40 años.
• Hipoteca interés mixto: En ellas se define un tipo fijo para los primeros años, según los ingresos netos del cliente y, pasado el tiempo, el interés se fija en función de las oscilaciones del mercado. Esto nos garantiza un tiempo de estabilidad en los años que tengamos el tipo de hipoteca fijo, que suelen ser en los que más lo agradecemos debido al esfuerzo económico que hacemos en la compra del inmueble.
• Hipoteca Cuota fija o constante: En esta modalidad la cuota se mantiene fija durante toda la vida del préstamo o hipoteca. El interés se fija del mismo modo que para la modalidad de cuota variable. El problema, o ventaja, de estas hipotecas, es que en función de la cuota pactada, el plazo final puede ser o bien más corto, o bien mucho más largo de lo normal (la medía hipotecaria está en 30 años).
• Hipotecas crecientes: La cuota puede regirse con tasa de crecimiento fija, con tasa de crecimiento referenciada al I.P.C, etc. Son similares similar a las de cuota fija, pero su cuota va aumentando, con lo que el periodo de amortización es mayor que una de interés variable.comparativa hipotecas.
• Hipoteca Multidivisas: Se trata de un tipo de hipoteca en la que el préstamo o crédito se pide en varias divisas incluida la del país donde se firma. Esta hipoteca se hace en divisas que tienen un tipo de interés bajo comparado con la moneda local, como puede ser el Yen japones o el Franco suizo, y cuya estabilidad sea clara. Su principal ventaja es que podemos ir cambiando de divisa cada cierto tiempo.
• Crédito puente o hipoteca: Se trata de una modalidad bastante curiosa ya que el banco o entidad financiera nos hace un préstamo para nuestra financiación, y con la garantía de que lo ingresaremos posteriormente con sus intereses correspondientes, esto se puede confirmar en un diccionario hipotecario en la web.
La hipoteca puente la suelen solicitar las personas que necesitan adquirir una nueva propiedad y que además no disponen de tiempo para vender su vivienda actual.






































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