¿Podemos considerarnos Seres Sabios?

El nombre científico fue asignado por el naturalista sueco Carlos Linneo en 1758 y se refiere al rasgo biológico más característico. Sapiens significa sabio o capaz de conocer y se refiere a la consideración del ser humano como animal racional, al contrario de otras especies. Pero ahora, es un momento para considerar si realmente nos podemos considerar Homo Sapiens. Si fuéramos seres sabios, ¿sería posible que estemos al punto de extinguirnos por mano propia? Es verdad que tenemos muchas cualidades que nos hacen diferentes de otras especies, pero no por eso somos mejores. Uno de nuestros problemas es creernos superiores, creernos los dueños del planeta y no vernos como pasantes, como invitados, como seres que, al igual que tantos otros, compartimos el planeta para vivir.

Personalmente, considero que lo de Sapiens es solo reflejo de un potencial, no de una realidad. ¿Somos realmente capaces de conocer, capaces de ser sabios? Sin lugar a dudas, la respuesta es sí. Pero somos capaces, potencialmente. No es la realidad en la que vivimos la mayoría, con un potencial que está dormido porque ¿qué, finalmente, conocemos? Los sabios, los que si llegaron a ser homo sapiens decían: conócete a ti mismo. Y, la mayoría tenemos nociones de nuestra personalidad, pero eso no es lo que somos, ni a eso se han referido los sabios. Saber que somos energía, saber que somos seres espirituales, seres multidimensionales, saber que todos somos uno. Eso no sabemos aunque, intuitivamente, lo sospechemos. Considero que el término, si se puede usar uno, para describir el estado de evolución en la que estamos es Homo ego-centrum. Esto significa que somos seres enfocados, centrados en nuestro ego en vez de Sapiens, o sea, en sabiduría.

Es evidente que el ego es lo que ha gobernado al mundo de los últimos miles de años conocidos. La ambición, el deseo por el poder, por el dinero. Lo notamos en la política, en la religión, y cómo se ha manejado la economía. En enfoque moderno en el consumismo sin darnos cuenta de los efectos colaterales sobre el medio ambiente y sobre nosotros mismos. Estamos realmente sumergidos en el gobierno del ego y es tal ese nivel de sometimiento que no nos damos cuenta del daño que nos ha hecho. Y aun si algunos nos damos cuenta, igual somos arrastrados por los sistemas, los mismos que tienen que morir o transformarse si queremos sobrevivir. Pensamos en yo, no en nosotros, y ese yo lo extendemos a lo que queremos pero no a la totalidad, al planeta que, finalmente, es uno.

Para domar al ego necesitamos domarnos a nosotros mismos, porque lo que sucede en el mundo es el reflejo de la energía que gobierna a la mayoría y como pensamos solo en el yo, no vemos que el todo es el reflejo del yo. Estamos muy enfermos los humanos, y seguiremos enfermos mientras el ego sea el centro de nuestra atención y crecimiento. Hemos perdido la noción espiritual esencial, aquella que no se mancha por las religiones, aquella que es eterna y trascendente, aquella que solo podemos conocer a través de la experiencia personal interior que se convierte luego en la experiencia de la totalidad. Es sumamente importante que abramos los ojos, que nos demos cuenta del estado de hipnotismo en el que vivimos, manipulado por los poderes mencionados que son la base de la destrucción que estamos creando. Necesitamos recuperar la humildad y reconocer que la sabiduría está en nosotros potencialmente y que para manifestarla necesitamos mirar internamente y despertarla. Aquí les dejo el videoblog relacionado con el tema.

http://www.youtube.com/watch?v=r24W-zEj3vU