El carrizal - dique en el este mendocino

Mendoza tiene lugares de increíble belleza natural, lo que la lleva a ser con más fuerza una opción de calidad para el turismo de todo el mundo. Es por ello que año tras año se inauguran nuevos hoteles en Mendoza que buscan capturar el creciente flujo de turistas que llega a la región. Hay mucho para ver y hacer en Mendoza, y para eso no es preciso trasladarse muy lejos de la capital mendocina, incluso para llegar a lugares perfectos para las actividades al aire libre y el turismo aventura.

A sólo 60 km de Mendoza, hacia el sudeste, descubrimos un magnífico espejo de agua: el Carrizal. Es un lago artificial producto del embalse el Carrizal, que recibe las aguas del río Tunuyán, regulando de muy buena forma su caudal y destinando el vital elemento a las áridas regiones circundantes. Este lago mide 15 km a lo ancho y 4 km de largo, extensamente apto para permitir la práctica de una gran cantidad de actividades.

Uno de los deportes más populares es la pesca deportiva. En la región se encuentra el Club de Pesca y Náutica Rivadavia, que ofrece todo el apoyo a los pescadores locales a la vez que controla que se cumplan las estrictas regulaciones que buscan conservar la población ictícola en un nivel razonable. El pejerrey es el rey de las aguas, y una de las presas más codiciadas, aunque también es viable conseguir tarariras y carpas de buen porte.

El windsurf y la navegación a vela son una de las prácticas mas viables en estas hermosas aguas.También se puede practicar buceo, lo que permite apreciar la enorme biodiversidad de la región. Este lugar es un oasis increíble, con playas ideales para gozar del fantástico microclima local. En la temporada de verano miles de visitantes se concentran en sus costas de suave declive para disfrutar del jetsky, las motos de agua y otras variantes más divertidas para ver la vista de la playa desde el lago, como la banana o la biciflot, una especie de bicicletas flotantes con propulsión a pedal.

Las posibilidades de alojamiento en Mendoza en la zona del Carrizal son muy grandes. Así, es posible encontrar hoteles de buena categoría, como también campings o alojamientos rurales, estos últimos con la posibilidad de disfrutar de las actividades campestres como las cabalgatas o el trekking, por alguno de los muchos rincones que en las márgenes del espejo de agua atesoran para los visitantes.