Después del divorcio hay cuestiones que arreglar
En ocasiones, cuando ocurre un divorcio, las personas suelen pensar que el mundo se ha acabado, pero no es así, solo se entra a una nueva fase de la vida. De hecho hay quienes se sienten más felices con su divorcio, ya que tienen menos tensiones y conflictos que afectaron su matrimonio.
La vida después del divorcio puede representar un momento de crecimiento personal, de descubrimiento y, por supuesto, de nuevas oportunidades.
Por otro lado, estar solo otra vez puede ser una experiencia intimidante y solitaria, especialmente si el divorcio lo que se tenía en mente y no se está preparado para vivir nuevamente solo o si se tiene la custodia exclusiva de los hijos.
Incluso cuando buscas arreglar la custodia, tener la responsabilidad de tiempo completo para tus hijos todos los días, día y noche, puede ser abrumador y agotador.
Una buena actitud
Para ayudarte a adaptarte a los cambios en la vida, evita la acumulación expectativas irracionales sobre ti mismo. Ata los cabos sueltos de tu divorcio, en caso contrario, toma un respiro y reagrúpate mental y físicamente. Aunque es posible que tengas grandes planes para tu futuro date la oportunidad de recuperarte del pasado.
En otras palabras, se perezoso, deja tu casa desordenada habitualmente, come comida rápida de vez en cuando y sáltate algunos entrenamientos en el gimnasio. Presiónate para que tomes decisiones importantes de inmediato o cometerás algunos errores de los que te arrepentirás más tarde.
Por otro lado, es necesario mantener esos hábitos que te hacen sentir bien contigo mismo y con la vida en general. Si eres demasiado perezoso, puedes caer en unas circunstancias de las cuales te resultará difícil salir. Esto sin duda va a interferir con tu capacidad para seguir con tu vida.
Tómate el tiempo para reflexionar sobre lo que pasó
Trata de poner tu experiencia reciente en perspectiva. Tómate el tiempo para entender porqué vino el divorcio a tu matrimonio y cómo pudiste haber contribuido a tus problemas matrimoniales. De lo contrario puede que cometas los mismos errores en tu siguiente matrimonio.
Llevar un diario es una buena manera de hacer esto y la terapia puede ser de gran ayuda también.
Acepta el hecho de que tu vida ya no es la forma en que solías ser y que nunca volverás a ser. Esto no quiere decir que tu nueva vida tenga que ser una decepción, simplemente es diferente. Trata de identificar tus cualidades. Por ejemplo, tienes más privacidad y tiempo para ti mismo, tu relación con tus hijos es más fuerte y puedes dormir mejor, porque ya no estás estresado por tu divorcio.
Busca un grupo de apoyo
Considera unirte a un grupo de apoyo de divorcio. Sus miembros pueden ayudarte a reforzar tu confianza a través de los tiempos de parada inevitable a medida que reconstruyes tu vida y pues proporcionar asesoramiento e información cuando se encuentra con problemas que no estás seguro de cómo manejar.
Asume tus nuevas tareas
Por lo general, el divorcio significa asumir nuevas tareas en casa (cocina, compras, cuentas con el banco, reparaciones del hogar, cortar césped, etc.), es decir tareas que tu ex pareja solía hacer.
Si necesitas ponerte al día rápidamente en las tareas del hogar, tus parientes y amigos pueden ayudarte. No te avergüences de pedirles ayuda. Las clases de lectura también son buenas maneras de adquirir nuevas habilidades. Pronto te sentirás orgullosa de lo que puedes lograr por tu cuenta y ganar confianza en tu capacidad para aprender aún más.
Busca actividades que tú y tus hijos disfruten
Si eres un padre sin custodia, quedarte con tus hijos puede ser incómodo para todos en un primer momento. Al ver que vives en un lugar nuevo sin ellos, tus hijos pueden sentirse extraños.
Para ayudar a que todos se sientan más cómodos y adaptarse a la nueva situación, trata de evitar que cada encuentro sea especial. Practiquen actividades simples: vayan a la tienda, hagan un paseo en bicicleta, hagan la tarea juntos o vean un video. Ayuda a tranquilizar a tus hijos para que vean que no todo en su vida ha cambiado.
Es normal si tus hijos no actúan contentos cuando vas por ellos y se ponen tristes de que te vas. Esa indiferencia puede ser la manera de protegerse a sí mismos emocionalmente, puedes darles confianza en que siempre estarás ahí para ellos y que tu amor no ha cambiado. No hagas suposiciones acerca de las formas en que los niños responden a los cambios que ocurren en sus vidas. En vez de eso, observa a tus hijos y trata de comprender las verdaderas razones de su comportamiento.
En Abogados y Asociados somos expertos en Divorcios Express. Nos ocupamos de los diversos trámites de divorcios y así como de juicios de pensión alimenticia. Contamos con amplia experi
Registro automático