No busques la aprobación de los demás

Puede andarse por la vida sin buscar la aprobación de los demás. Así es como debe ser. Pero muchos toman esa actitud meramente porque alguien se los ha aconsejado. Y eso no es de verdad tomar un camino propio. No se está siendo consecuente con uno mismo y sí con lo que otro ha dicho que debes hacer.

Para actuar en verdad por uno mismo hay que conocer las razones que fundamentan nuestro comportamiento. De lo contrario estaríamos simplemente imitando a otros. Por eso permíteme darte algunos argumentos de porqué no esperar la aprobación de los demás:

Muchas veces las personas están de acuerdo con lo que haces hasta que les preguntas su opinión. Entonces comienzan a encontrarle defectos a tu vida que jamás habían notado; defectos ficticios.No olvides que tú tienes intereses diferentes. Cuando pides aprobación, los demás solo te complacerán si lo que tú haces responde ante todo a sus intereses, no a los tuyos.Tú tomas decisiones sobre tu vida. Y quien mejor la conoce eres tú, porque has estado desde el mismo principio de la historia. Ellos llegaron mucho después; así que si alguien tiene las respuestas no son otros, eres tú.Puede que esperes que los demás te aprueben. Pero si fallas no podrás pedirles cuentas por tu error. En cambio, si triunfas querrán adjudicarse tus éxitos. Podrán decir que lo lograste gracias a que los escuchaste.Ellos también tienen sus propios problemas. No tienen tiempo ni obligación de guiarte todo el tiempo. No tienes porqué aceptar ser una carga para otras personas.Es posible que pidas aprobación porque te sientes inseguro. Pero al hacerlo tu incertidumbre no disminuye, aumenta. No sabes hasta cuándo ellos podrán ayudarte a ti que te crees incapaz de hacerlo solo.Te subordinas inadecuadamente a personas que tienen tu mismo nivel social. No hay motivos para que hagas semejante cosa.Al esperar aceptación todo el tiempo no fortaleces tu propio carácter. Lejos de eso fomentas una dependencia excesiva hacia otras personas. Pierdes la oportunidad de adquirir confianza y habilidades propias.Pones a otras personas a decidir sobre cuestiones sobre las cuales solo tú tienes derecho y competencia.

Creo que esas son algunas de las buenas razones para actuar confiando o desconfiando solo en uno mismo. Sin embargo, es necesario hacer notar algunos detalles importantes.

Muchas veces tenemos que tomar decisiones sobre cuestiones que afectan también los intereses de otras personas. En esos casos ellos tienen todo el derecho de ser consultados.

Tienes que saber que un hombre es un completo ignorante en todo excepto en las únicas cosas que sabe. Y muchas veces vale pedir consejo y opinión a otras personas que pudieran tener más o mejores ideas que nosotros en alguna cuestión.

Los seres humanos no son ni mucho menos tan diferentes entre sí como algunos dicen. Por eso comparten gran parte de los problemas e intereses. Eso hace que sea útil asociarse y compartir ideas. Y de ahí es de donde salen muchas de las mejores soluciones para todos.

Y, por último, vivimos en una sociedad y es imposible e inadecuado existir ignorando a los demás. Tenemos que admitir que hasta cierto punto sí nos importa lo que los otros opinan. Y cuando corresponda, lo tomaremos en cuenta.

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