Ayuda para superar una infidelidad

También influirán el tiempo que lleven juntos, los compromisos adquiridos y el volumen de mentiras que tu compañero/a haya dicho para perpetuar el otro vínculo.  Sin embargo, aunque sea un momento de tensión y tristeza, deberás saber que por tu propio bien es necesario procesar todas las emociones y superar el trauma generado, independientemente de si decides continuar o no con la relación. 

Una posible reacción inicial puede ser emprender una desesperada búsqueda de respuestas a todas las preguntas e inquietudes generadas en el momento mismo del descubrimiento:  ¿cómo, cuándo, por qué, cómo es él/ella, qué me falta?.  Preguntas que con el tiempo tenderán a complejizarse y a generarte inestabilidad a la hora de relacionarte con tu pareja o emprender otro vínculo amoroso más adelante. 

También es posible que ante la infidelidad te vuelvas reactivo/a y desees desfogar tu ira con tu pareja, hijos, amigos/as o allegados; que, por el contrario, desees escapar de todo lo que te rodea y cerrar este capítulo sin mirar atrás; o que llegues a pensar en pagarle con la misma moneda a tu pareja y devolverle la traición para hacerle experimentar, a menor escala, lo que se siente que alguien amado sostenga una relación con alguien más, aún cuando en realidad no desees establecer contacto con otros cuando estás atravesando un momento duro como este.  Sin embargo, independiente de cuáles hayan sido tus reacciones y elucubraciones, lo importante es preocuparte por recobrar tu integridad y tranquilidad.

Las experiencias traumáticas pueden llegar a desencadenar enfermedades o desequilibrio emocional a mediano y largo plazo, por lo cual debes tener muy presente que no puedes permitirte prolongar ese estado de ira o confusión que es común experimentar al inicio.  Haz todo lo posible por centrarte en ti mismo/a y sanar las heridas que éste descubrimiento te ha ocasionado.  Sé cuidadoso/a y amoroso/a contigo mismo/a, dándote el tiempo necesario para procesar las emociones suscitadas y no te apresures en tomar un desición respecto a la relación. 

Empieza por recordar quién solías ser antes de iniciar esta relación y recupera el poder sobre tu vida nuevamente, sabiendo que solo/a o con tu pareja, lograrás superar este momento difícil y salir del otro lado.  Halla estrategias para acallar tu mente y parar la insaciable búsqueda de respuestas y el deseo de huir, herir o engañar.  Estas estrategias podrían ir desde empezar a hacer deporte, iniciar un curso en un área diferente a la que te desempeñas, emprender la lectura de un libro o contactar viejos amigos/as. 

Una vez hayas logrado sentirte tranquilo/a nuevamente y con la suficiente claridad como para tomar una desición, entonces será momento de pensar cuál ha de ser el futuro de la relación afectada.  Deberás determinar si quieres continuar o si deseas estar solo/a un tiempo, poniendo en una balanza toda la situación y el amor que sientes por tu pareja y por ti.  Si deseas perdonarle, establece límites claros y llega a acuerdos para continuar con la relación. Si tu pareja acepta su responsabilidad y desea apostar por la relación, da lugar al encuentro y empieza a recuperar la confianza poco a poco hasta que la relación vuelva a ser enriquecedora para ambos.

Muchas relaciones se ven beneficiadas al superar una infidelidad y otras tantas no soportan la presión y la falta de confianza generadas tras el descubrimiento de una traición.  Así que depende de ti determinar si deseas invertir más tiempo y energía en ese vínculo o si es tiempo de permitirte conocer a otras personas y establecer otros vínculos. Aprovecha este momento y reflexiona sobre ti mismo/a y la vida que quieres llevar.  Sólo tú podrás determinar qué es lo más provechoso para tu desarrollo como persona y trazar el camino para conseguir aquello que deseas en una pareja y en una relación amorosa.