Productos de limpieza ecológicos

Los hábitos de consumo se van orientado hacia un consumo más responsable, sin embargo aun estamos lejos de conseguir los resultados deseados. Se necesita educar a la población para que haya una mayor concienciación y poder reducir el impacto medioambienal que está originando tantas catástrofes. Se puede observar como va creciendo el número de gente que se decanta por una alimentación ecológica para mejorar su salud y colaborar con el respeto al medio ambiente, pero de igual manera debemos saber que también los componentes de los productos de limpieza puede ser perjudiciales para la salud, y por lo tanto, es fundamental empezar a consumir productos de limpieza ecológicos.

Recientes estudios han llegado a la conclusión de que existe un mayor número de sustancias tóxicas en nuestro hogares que en la calle, debido a los ingredientes químicos con lo que se fabrican los productos de limpieza convencionales. Este problema es muy serio, y sin embargo, no se informa a la población de los daños que puede ocasionar tanto a nuestra salud como el impacto medioambiental que estamos provocando en nuestro entorno.

Existen alternativas eficaces para mantener un hogar limpio, pero sin ser nocivo para el planeta y nuestro organismo. Los productos de limpieza ecológicos no solo son respetuosos con el medio ambiente, sino que además su precio ha ido evolucionando llegando a tener precios competitivos y con resultados de desinfección extraordinarios.

Estos productos de limpieza ecológicos normalmente vienen concentrados para además evitar un uso desproporcionado de envases de plástico. Contienen una concentración más grande de ingredientes activos en vez de estar rebajados en agua como los productos de limpieza convencionales, lo que se traduce en mayor efectividad y una menor emisión de gases contaminantes al reducirse su transporte.

Analicemos ahora las sustancias químicas que podemos encontrar en los que se consideran “inofensivos artículos de limpieza” y las consecuencias que su exposición tienen en la salud.

Si alguna vez te has fijado en la etiqueta de estos productos habrás observado que se muestra un símbolo de color naranja con los siguientes epígrafes: “explosivo”, “comburente”, “inflamable”, “irritante”, “nocivo”, “tóxico”, “carcinógeno”, “corrosivo”, “infeccioso”, “tóxico para la reproducción”, “mutagénico” o “peligroso para el medio ambiente”. La próxima vez que vayas a comprar uno de estos artículos te darás cuenta que todos lo llevan. 

Veamos algunas de las sustancias químicas más peligrosas presentes en los productos de limpieza convencionales:

• Almizcles sintéticos: son sospechosos de ser disruptores endocrinos.

• Ftalatos (phtalates): sus efectos en el sistema endocrino, particularmente durante el embarazo, la lactancia y la infancia, son muy preocupantes, llegando a causar daños reproductivos o en el desarrollo, en los órganos, supresión del sistema inmune, disrupción endocrina y cáncer.

1. 1,4-d ichlorobenzene: además de haber sido relacionada con daño pulmonar, esta sustancia también es conocida por provocar toxicidad a los órganos y a los sistemas del cuerpo humano. Terpenes: reacciona con el ozono del aire originando sustancias tóxicas similares al formaldehído, un agente cancerígeno conocido.

2. Benzene o Benceno: agente cancerígeno para el cuerpo humano, el cual se relaciona con un aumento del riesgo de leucemia y otras enfermedades de la sangre, además de ser tóxico para los órganos y los sistemas del cuerpo humano.

3. Styrene: relacionado con el cáncer, con defectos de nacimiento o del desarrollo, con toxicidad para los órganos y los sistemas del cuerpo humano, y con problemas de reproducción y fertilidad.

Otros compuestos químicos altamente peligrosos que merodean en tu hogar son:

• Phenol: guarda relación con daño a los sistemas respiratorio y circulatorio, daño cardiaco, problemas respiratorios, daño al hígado, riñones y ojos.

• Nonylphenol ethoxylates (NPEs): puede ser la causa de que los peces machos se transformen en hembras en los canales de agua subterránea por todo el mundo.

• Formaldehído: es un agente cancerígeno sospechoso.

• Solventes del petróleo: pueden llegar a dañar las membranas mucosas.

• Cellosolve: puede dañar los riñones, la médula ósea, el hígado y el sistema nervioso.

• Triclosan: no sólo elimina a la bacteria, sino que se ha demostrado que también mata a las células humanas.

En conclusión, diversas investigaciones advierten del incremento del número de gente que desarrolla asma y problemas respiratorios. Este es uno de los efectos más inmediatos que se puede constatar a la exposición a estos químicos. Pero también se ha observado como ocasiona alteraciones en el sistema hormonal, irritaciones, dolores de cabeza, náuseas, trastornos en la visión, afecciones del sistema nervioso e inmunológico, envenenamiento del hígado, alergias y por último cáncer. 

Estas sustancias llegan a nuestro organismo por inhalación, por contacto directo o por la propia ingestión.

Considero que con todo lo expuesto hasta ahora ya va siendo hora de que cambiemos en mayor medida nuestros hábitos de consumo y tomemos conciencia de la problemática planteada. Está en nuestras manos pasar esta información a toda la gente que conozcamos para que también tomen medidas.

A medida que nuestra salud se deteriora también contribuimos a la degradación del medio ambiente por medio de las sustancias químicas contaminadas que llegan a los vertederos y a los desagües de nuestros hogares.

Empieza a comprar productos de limpieza ecológicos desde hoy y estarás aportando tu granito de arena a la salud del planeta y de tus seres queridos. Las generaciones futuros te lo agradecerán. 

P romovamos un hogar eco libre de sustancias tóxicas.