Osmosis inversa: agua de la mejor calidad
En esta entrada vamos a contaros en qué consiste el proceso de la osmosis inversa doméstica. Esta tecnología usa una membrana semipermeable para poder separar y quitar los sólidos disueltos, tanto pirogénicos, orgánicos, materia coloidal, virus, microorganismos y diferentes bacterias del agua.
Garantiza el correcto tratamiento del agua, tanto en el aspecto desalinizador, físico, bacteriológico y químico. El tratamiento funciona mediante membranas de poliamida semipermeables, enrolladas en espiral; estas actúan como filtro, reteniendo y eliminando gran parte de las sales disueltas, impidiendo el paso de bacterias y virus, consiguiendo un agua esterilizada y de gran pureza. Con este sistema se consigue que aguas que cuenten con un alto índice de sodio, boro, hierro, calcio, nitratos, sulfatos, puedan ser tratadas convenientemente hasta poder alcanzar los límites considerados como agua aceptable para su uso.
¿Cómo funciona el proceso de osmosis inversa?
El secreto de este sistema son las membranas filtrantes, las cuales pueden considerarse como filtros moleculares. El tamaño de los poros de los filtros es muy reducido, por lo que es necesaria una presión consistente para hacer pasar el agua a través de ellos y poder filtrada, quedando todas las impurezas retenidas en ellas y proporcionando agua de gran calidad. La suciedad que queda en estas membranas son arrastradas y lavadas por la propia corriente de agua, realizando una autolimpieza constante en todo momento.
Por ejemplo, si a una corriente de agua salada le aplicamos una gran presión, se conseguirá obtener un equilibrio con dos corrientes: una que es la que atraviesa la membrana, la cual queda libre de sólidos disueltos y también de microorganismos. La otra se concentra en estos elementos sin que éstos lleguen a depositarse en la membrana.
Este sistema de tratamiento de aguas no solamente podemos encontrarlo en los hogares de aquellas personas que quieren una mejor calidad de su agua sino que también puede ser instalado en empresas de cosmética y farmacéutica, industria del vidrio, plantas de embotellamiento, hospitales, centros de reciclaje, laboratorios, etc.
Los equipos de osmosis inversa domésticos proporcionan agua de máxima calidad, ideal para cocinar, beber, hacer cafés e infusiones, regar plantas delicadas, peceras y muchos otros usos. Gracias a ello se consigue un agua pura de baja mineralización, ideal para dietas pobres en sodio; además estos dispositivos son de fácil instalación, pudiendo ser colocados bajo el fregadero de la cocina por ejemplo.
¿Qué ventajas reporta este sistema de tratamiento de aguas?
Son muchas las que nos ofrece pero destacamos diferentes usos como un importante ahorro en la compra de agua embotellada, porque siempre tendremos el agua de la mejor calidad posible, podremos hacer cubitos de hielo sin ninguna clase de sabor, nos permite cocinar sin añadir ningún sabor, simplemente la comida sabrá a comida. Asimismo tendremos café e infusiones con un sabor único, podremos usarlo con plantas de interior que requieran de especiales cuidados como pueden ser los bonsáis, rellenar el agua de un acuario y usarla con algo tan sencillo como una plancha, donde no quedarán residuos de cloro.

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