SE OLVIDARON DE DON JUAN
Es tristísimo que la prensa española no haya hecho mención sobre la importancia,aún hoy, de la figura de Don Juan de Borbón y Battenberg,abuelo del recientemente proclamado Rey Don Felipe Vl de España. Se ha pasado como de puntillas por la figura de Don Juan,Conde Barcelona y Rey sin trono por los avatares del destino.Figura que no debería acumular el polvo de quien queda arrinconado en el fondo del armario de la Historia de España.
Exiliado durante 27 años,la mayor parte del tiempo en Portugal,mantienen a Don Juan alejado de su país donde Franco le prohíbe poner un pie tras la proclamación del Régimen al que dio paso la victoria del bando nacional.Difamado y desacreditado por el dictador,la figura del Conde de Barcelona ha sido una gran desconocida para los españoles,destacando la circunstancia dura y cruel para un Rey,de no llegar a reinar nunca.
Y actualmente en España,con la rapidez con la que pasamos página de tantos y tantos acontecimientos que marcan los destinos de esta patria tan debatida,habiendo consagrado al recientemente abdicado Rey Juan Carlos como conciliador y catalizador en momentos clave de la historia reciente,se antoja incómodo ahondar en la regia figura de Don Juan.
Y fue él quien desde el amargo pero afectuoso exilio en Estoril,hizo más por la Causa monárquica,no los franquistas quienes le mantuvieron apartado de volver hasta,prácticamente,sus últimos días.Ni espiado por los servicios secretos de Franco,ni advertido por sus parientes de media Europa,como fue el caso de su primo,más tarde asesinado por el IRA Louis Mounbatten,el abuelo de Felipe Vl dejó de luchar en toda su vida por la Causa.
Y cuando Franco le aparta definitivamente a favor de Don Juan Carlos,Don Juan culminaría toda una existencia dedicada a continuar el legado de los Borbones:el que su padre Alfonso Xlll entendió como un servicio a una España unida,leal a todos los españoles y bajo un conjunto de libertades.
La historia se sigue cebando de manera insistente en Don Juan y sin embargo sus propósitos se verían más tarde plasmados en la Carta Magna de 1978 donde los principios democráticos son los mismos que años atrás esbozaría en el Manifiesto de Lausanne y que en España pasó totalmente indvertido.
Como un lamento triste,digno y de alargada sombra,a manera de fado portugués,el eslabón perdido que supone Don Juan de Borbón para los monárquicos durante el periodo totalitario de Franco,dio origen a cuatro décadas de reinado de otro Borbón,su hijo,cuya designación tuvo que ver por televisión mar adentro.Se sentía orgulloso,tanto como cualquier padre;tanto como para abrazarlo después mientras daba vivas a España y al Rey.
Felipe Vl ha tenido un breve recuerdo para su abuelo,aquel que llevaba sus dos brazos tatuados con sendos dragones.El heredero de Alfonso Xlll que fue amado profundamente por los portugueses porque era un hombre noble,fuerte y comprometido, y el día de su funeral ondearon las banderas de España a media asta durante tres días.
Hoy,cuando a unos nuevos aires monárquicos les toca ver como va España a unos derroteros desconocidos,se alzan algunas voces rememorando la imagen del que fuera hijo,padre y abuelo de Rey.Aún quedan unos pocos hombres que lo valoran y reividican para El un lugar desempolvado,un lugar en la Historia moderna de España.

Alfredo Rodrigo de Santiago





































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