Condiciones de las comisiones de cuentas bancarias

Existen en España algunas cuentas bancarias sin comisiones. Esto es, cuentas que ofrecen distintos productos y servicios pero que no cobran comisiones por ello. En general las cuentas bancarias sin comisiones se ofrecen por Internet, y resultan atractivas debido a que no suponen gasto alguno. Sin embargo, siempre debemos leer la letra chica. En ocasiones tal vez sea más conveniente contratar una cuenta bancaria que tenga algunos gastos pero que ofrezca una buena rentabilidad, en contraposición a cuentas bancarias sin comisiones que no ofrezcan rentabilidad alguna. Por ello, antes que nada, veamos en detalle qué son las comisiones. Según el Banco de España, las comisiones bancarias son cantidades que los bancos o entidades de crédito cobran a los titulares a modo de compensación por los servicios brindados. Aquí ya tenemos una primera clave: las comisiones se cobran como una contraprestación; esto es, el banco ofrece algo a cambio de lo que cobra. Las cuentas bancarias sin comisiones, por lo general, tampoco ofrecen muchos servicios, por lo que son cuentas más "básicas". Las comisiones pueden ser cobradas todas juntas, como un solo cargó de tipo genérico, o por separado, detallando en cada caso qué comisión se aplica y por qué servicio. Entre las características generales de las comisiones, vemos que tienen el carácter de libres. Esto quiere decir que los precios asignados a las comisiones pueden ser puestos por las entidades a su disposición, salvo en algunas excepciones como las cancelaciones anticipadas en los préstamos hipotecarios. También es importante aclarar que las comisiones solo pueden responder a servicios que el banco haya prestado efectivamente y de los que el titular tenga pleno conocimiento: no se pueden cobrar comisiones por servicios que el titular no haya solicitado o aceptado. Otra condición básica de las comisiones para las cuentas bancarias es que las tarifas que se cobran deben figurar en un folleto que sea redactado de forma clara y que sea fácil de comprender. Esta documentación también debe incluir información respecto de las condiciones de valoración, esto es, la fecha a partir de la cual el dinero depositado comienza a generar ingresos por los intereses en la cuenta corriente o de ahorro. En este folleto, los importes designados en las tarifas tienen carácter de máximos: no se puede cobrar más que lo que figura en el documento. En caso de que existan modificaciones en las comisiones para contratos de una duración indefinida, como en una cuenta corriente, entonces deberán ser comunicadas debidamente mediante notificación a los clientes con una antelación razonable. En caso de que supongan un beneficio para el titular de la cuenta, las modificaciones podrán aplicarse sin notificación de forma inmediata. Estas son las condiciones generales con las que los bancos deben trabajar con las comisiones. Estas serán aplicadas, como hemos visto, en conocimiento del titular y a contraprestación de servicios, por lo que el usuario nunca debería estar fuera de aviso respecto de lo que se le va a cobrar. Por ello, antes de deslumbrarnos con cuentas bancarias sin comisiones, mejor sería ver qué condiciones conllevan estas también, y cuál será la rentabilidad que obtendremos entre una y otra. A veces es mejor contratar una cuenta que sí aplique ciertas comisiones, pero ofrezca mayor remuneración.