¿Cómo se gestiona el stock en ecommerce?
La integración de stock en un ecommerce se ha convertido en una política indispensable para cualquier comercio electrónico que quiera satisfacer a su clientela y optimizar sus gastos. A continuación, analizaremos la importancia del stock en las tiendas online y cómo le afecta la logística en el ecommerce.
Las ventajas de los ecommerces son evidentes: ahorro en gastos de personal, venta durante 24 horas, almacén dependiente de los proveedores, etc.
Estos beneficios son tan notables que no debe extrañarnos que muchas tiendas físicas se decidieran a lanzar su segunda línea de venta a través de este medio. Sin embargo, tanto en los ecommerces originales como en los promovidos por las tiendas convencionales se han producido fallos de desorganización, en general, por no contar con una administración seria y sofisticada del stock.
El éxito de esta modalidad de venta está directamente relacionado con un acceso ágil y coordinado al stock. En este sentido, es preciso echar mano de las innovaciones tecnológicas en materia de logística.
Sin embargo, pueden aparecer algunos fallos habituales. ¡Pon atención! A grandes rasgos, el concepto de mantenimiento de un ecommerce por parte de algunas empresas se ha limitado a digitalizar un catálogo y publicarlo en Internet, sin haber dado la importancia debida a cuestiones clave, como la actualización de productos, precios o cantidades disponibles.
Esta disfunción origina, primeramente, dos problemas:
- La venta de un producto agotado, lo que puede dañar enormemente la credibilidad del ecommerce.
- Perder compradores de productos que serían demandados, pero no aparecen todavía en la página web.
Para que tu ecommerce funcione como un reloj, es necesario automatizar las fases, lo que implica una transmisión de información en tiempo real entre el proveedor del stock y el comercio electrónico.
Esta información tiene que estar totalmente actualizada, en cuanto a los modelos disponibles y las características de los artículos expuestos virtualmente. Has de valorar que el cliente no tiene acceso al producto y, por tanto, sus datos han de ser muy claros.
En este sentido, los cambios tienen que ser puestos de manifiesto al instante, para que los clientes no pasen por experiencias negativas. Esta dinámica, por su parte, es contraria a la actualización manual asumida por algún empleado, ya que está caracterizada por un alto margen de error y supone una carga de trabajo que no compensa.
Asimismo, la rapidez en el envío es fundamental y, como el resto de fases, ha de estar totalmente automatizada.
En definitiva, esta automatización solo puede conseguirse mediante el recurso a una herramienta informática que nos permita la gestión integrada de todas las fases del stock. En este aspecto, las empresas de logística integrada, gestión de la información y custodia ofrecen sistemas de gestión ERP (Enterprise Resource Planning) que actualizan la información del stock en tiempo real.

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