Claves de una buena comunicación
Si algo caracteriza a las personas que logran el éxito es su facilidad para desenvolverse en las relaciones interpersonales.
Son personas que saben expresar eficazmente aquello que desean y lograr en su interlocutor un sentimiento de respeto hacia su persona. Esa habilidad social además es una constante en su vida. No tienen altibajos.
Su éxito no radica sólo en lo que dicen sino que hay una serie de aspectos que complementan dicha habilidad, estamos hablando de la comunicación no verbal.
Su mirada es franca y directa. En la mirada transmiten esa seguridad que hace que la otra persona sienta un respeto ante la persona que tiene en frente.
Sin embargo, el componente más importante de la comunicación no verbal es la sonrisa. Ésta es el arma más poderosa que tiene el ser humano para seducir y lograr cosas aparentemente imposibles. Eso sí, tiene que ser una sonrisa franca, nada de imposturas.
En cuanto a la comunicación verbal uno de los componentes más importantes, aparte del mensaje, es el tono de voz. La seguridad de la persona tiene que quedar reflejada en su tono de voz.
Otra característica curiosa es la claridad en la exposición del mensaje. Son directos, no pierden el tiempo en rodeos. Van directos a lo que les interesa. Suelen ser personas muy ocupadas, con falta de tiempo lo que les lleva a no querer perderlo en formalismos.
Además suelen ser personas con una fluidez verbal muy destacada. Suelen estar acostumbrados a tratar con muchas personas al cabo del día y continuamente están hablando por lo que adquieren cierta maestría en la comunicación verbal.
Nadie nace aprendido, si bien puede haber una cierta predisposición a dominar el arte de la comunicación, sin embargo, con práctica hasta el más tímido y retraído de los seres humanos se puede convertir en un excelente orador. Sólo se requiere práctica, dejar un lado la vergüenza y ser valiente.
Daniel Cana Flórez
http://reflexionesdeunabuenavida.blogspot.com

Siempre fuiste un ganador, ya desde el primer momento ganaste la carrera por la fecundación, lo que te convirtió en ese ser que eres ahora.





































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