Comercio online, emprender con conocimiento de causa
El comercio electrónico se está imponiendo a pasos agigantados en nuestra sociedad. No es extraño conocer el nacimiento de una nueva app para pedir que te lleven comida a casa o para obtener tal o cual servicio. Dentro de esta explosión virtual tiene mucho que decir el comercio online, que está desbancando poco a poco al tradiconal, obigando a la reconversión o cierre de la tienda de toda la vida.
Abrir una tienda virtual tiene muchos beneficios, casi tantos como desventajas. Es cierto que puedes llegar a un público inmeso y que en muchas ocasiones tienes unos costes de producción o almacenamiento my bajos. Sí, es cierto, pero no todos consiguen un proyecto ganador. Por todas partes encuentras ejemplos de alguien que empezó en un pequeño local y varios años después tiene una nave inmensa desde la que distribuye a toda España.
Se puede conseguir, claro que sí, no hay nada más que ver el ejemplo de Amazon. Ahí está la multinacional para dar fe que es posible. Pero para el pequeño emprendedor todo son problemas.
Pongamos que alguien decide meter los pocos ahorros que tiene en un negocio de camisetas personalizadas. Compra la maquinaria necesaria, arma un prestashop, con más difícultades de las previstas, a menos, claro está que tengas un buen colchón económico y puedas acudir a un profesional. Pero tampoco es una panacea. He visto proyectos creados por empresas muy solventes que no tenían ni pies ni cabeza y sólo se habían llevado a la práctica con el objetivo de cobrarle al cliente por una página web.
Porque casi nadie te dice que con poner una página web en la Red no es suficiente, hay que tener visibilidad. Y ahí, amigo, entra el SEO. Y resulta que un buen día tienes una página web para vender camisetas, máquinas para hacerlas pero que a tu web no llama nadie porque, permítamente el símil, la has abierto en el medio del campo, en lugar de en la calle principal de una ciudad o en un gra polígono industrial: nadie te ve.
Te pones a estudia SEO y te encuentras con que la tarea es titánica. Aquí, como en lo anterior sólo hay dos opciones, o aprendes por tu cuenta o pagas por que alguien te asesore.
El SEO no es difícil pero también te puedes encontrer con el handicap de que no hay enseñanza reglada, tienes que bucear en internet, pagar por cursos y rezar porque no te lo dé un charlatan, que te haga perder tu dinero y tu tiempo.
No es fácil, se puede conseguir, pero antes de emprender, muchos deberían saber todas las aristas que tiene abrir una tienda de comercio online.






































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