Crédito prendario

La invención de diversos tipos de crédito ha facilitado enormemente algunos trámites financieros que en gran cantidad de ocasiones suelen tomar amplios periodos de tiempo; un claro ejemplo de ello es el crédito prendario que aparte de ser uno de los créditos más fáciles de obtener, también posee la capacidad de ser algunos de los más sencillos de pagar.

El crédito prendario o pignoraticio es un sistema de crédito que se concede bajo ciertas condiciones tanto de tiempo como de garantía, pues estos se basan en ofrecer préstamos por periodos de tiempo determinados, bajo una prenda de garantía que debe dejar la persona acreditada, con el propósito que esta se comprometa a cancelar la deuda; por lo general esta prenda debe ser un bien inmueble que supere o iguale el valor comercial de crédito prestado. Un importante aspecto a tener en cuenta es que este tipo de crédito es que este se hace bajo ciertos niveles de interés, con el propósito de obtener ganancias del crédito proporcionado. Es bueno mencionar que la prenda de garantía o inmueble quedara retenido en caso que el acreditado no responda con las obligaciones del crédito prendario.

La creación del crédito prendario se gesta en el siglo en el siglo XV, donde los monjes franciscanos proporcionaban a los campesinos la posibilidad de obtener dinero por medio del desprendimiento de una prenda de garantía.

Para el siglo XVIII, los créditos prendarios variaron su actividad, pues se comenzaron a crear lugares específicos donde se proporcionaban piezas de oro y plata a cambio de objetos de gran valor sentimental o económico, por lo general reliquias familiares o joyas.

En la actualidad la creación de lugares como las casas de empeño han facilitado enormemente la obtención de este tipo de crédito, pues los procesos se hacen simplemente llevando el elemento inmueble para que este sea analizado y determinar cuanto dinero se puede prestar con base al objeto.

Todo el proceso de crédito prendario posee ciertas virtudes, entre ellas algunas de las más destacadas son:

• Ofrecer liquides al instante.

• Proporcionar amplios periodos de tiempo para cancelar el crédito.

• Ofrecer la recuperación total de la prenda en garantía una vez se halla cancelado por completo el crédito.

• Por lo general los índices de intereses son muy bajos.

• Es un crédito muy rápido y sencillo de obtener.

Aunque son muchas más las virtudes que puede ofrecer este crédito, las ya mencionadas son las principales a tener en cuenta.

Es muy recomendable antes de obtener un crédito prendario leer con gran cuidado el contrato que se va a firmar, pues ciertos lugares pueden sobrepasar los niveles de interés o pueden disminuir el tiempo para la cancelación del crédito, con el fin de obtener mayores beneficios económicos.

Dado lo anterior queda demostrado que aunque los créditos prendarios sean un crédito muy fácil y sencillo de obtener, se debe tener cuidado de no caer en un estafa o situación desfavorable para nosotros, sin embargo es bueno resaltar que gracias a este tipo de crédito se puede conseguir una liquides inmediata facilitando una solución rápida y sencilla del problema económico.