A finales del año 2011, tuvieron a bien los legisladores mexicanos realizar la modificación a nuestra Carta Magna, y comenzar a cumplir con las obligaciones que como Estado signante de múltiples tratados en materia de derechos humanos deben realizarse adecuaciones a su legislación.
Nuestra nueva Carta Magna reconoce que en los Estados Unidos Mexicanos todas las personas gozarán de los derechos humanos reconocidos en esta Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte, así como de las garantías para su protección, cuyo ejercicio no podrá restringirse ni suspenderse, salvo en los casos y bajo las condiciones que esta Constitución establece. ...
Apenas se nos reconoce los derechos humanos en México, a todas las personas y quiero resaltar que se reconoce también como personas a los niños, niñas y adolescentes, que afortunadamente en el Art. 4 se reforma y aparece el principio pro-persona del interés superior de la niñez, garantizando de manera plena sus derechos.
Se reconoce a los niños y las niñas tienen derecho a la satisfacción de sus necesidades de alimentación, salud, educación y sano esparcimiento para su desarrollo integral. Este principio deberá guiar el diseño, ejecución, seguimiento y evaluación de las políticas públicas dirigidas a la niñez.
Aunque mejor redactado que el anterior, aun no reconocen otros derechos de la niñez como particiapación activa, libertad de expresión, dercho al juego, derecho a la información, etc.,
En nuestro artículo 73 xxix-p. Se adiciona la facultad al Congreso a expedir leyes que establezcan la concurrencia de la Federación, los Estados, el Distrito Federal y los Municipios, en el ámbito de sus respectivas competencias, en materia de derechos de niñas, niños y adolescentes, velando en todo momento por el interés superior de los mismos y cumpliendo con los tratados internacionales de la materia, de los que México sea parte, pero se les olvido un pequeño detalle a los legisladores, el establecer que se deberá contar con un presupuesto especifico para tener recurso en los Estados y Municipios y dar plenamente las garantías de los Derechos de niños, niñas y adolescentes.
Estamos comenzando, estas son solo algunas de las modificaciones que se han iniciado en México, queda mucho por hacer, mucho trabajo que sociedad, infancia, gobierno debemos realizar en conjunto y dar esta oportunidad a los principales protagonistas los niños, niñas y adolescentes no solo de México, sino del Mundo.
