Hace un año, cuando al despertar, abría los ojos… ¡quería volver a cerrarlos!,
¡Cuanto me dolía despertar!... en medio de tanto dolor
¡Cuanto dolor reposaba!...como burbujas de basura sobre la quieta superficie del agua pura de los oasis y espejismos.
Cuantas noxas, cual bandadas de cuervos, circulaban en mi sangre…hambrientos de Hígado.
Cuanto llanto afloraba en mis ojos, como lágrimas saladas sobre la belleza encantada de jazmines y claveles.
Hace un año caminaba en sandalias sobre las arenas sedientas, de las horas y los días.
Hace un año cerraba mis ojos, soñando que al despertar el viento de la luna besaba mi rostro.
De mis sueños…sólo quedaban detritus, de mis logros solo quedaban desperdicios que se hermanaban con rabia y desolación, en el fondo de mi precipicio.
Hace un año era un cadáver ambulante que sólo esperaba ser enterrado
Hace un año el valor y el coraje querían beber cianuro,
Temía quedarme a solas con mi dolor y empañar los ojos siempre limpios, puros y castos de mis hijos,
El valor en la sangre agonizaba
Hace un año, el silencio circulaba en las arterias y golpeaba con sus pulsos el tejido melancólico de mi alma.
Hace un año las preguntas llenas de rabia, tocaban con desolación las puertas del Cielo…y cuando estas se abrían solo había… Silencio
Hace un año… ¡Solo esperaba un Milagro!...