No sé en qué momento me lo enseñaron pero desde que soy muy pequeño siempre empecé a establecerme prioridades en la vida; cuando tenía algo de dinero no corría a comprarme dulces o juguetes que sabía me durarían muy poco sino lo que realmente necesitaba en ese momento, una mochila o ropa tal vez. Esto generó obviamente muchas preguntas raras sobre mi comportamiento, "niño viejo" me llamaban cada vez que contestaba que tenía otras prioridades... gratos recuerdos que fueron el inicio de lo que hoy estoy logrando.
Los partidos de futbol y fiestas eran menos importantes que mi deseo de superarme, de estudiar en una universidad y ganar mucho dinero para salir de donde estaba, cada vez era mas dificil no ceder ante tales tentaciones pero la perseverancia logro su objetivo y pude estudiar una profesion y poder trabajar mejor remunerado que si no hubiera estudiado nada; aunque aún hoy mi familia me siga diciendo que soy un aburrido cuando digo que tengo otras prioridades para gastar mi dinero, como educarme y ahorrar. Y es que a lo largo de los años, he aprendido con gratas experiencias que no hay nada mejor que establecerse prioridades en la vida, saber qué cosa le conviene a uno y poner tu esfuerzo en lograrlo antes que desperdiciar el tiempo y recursos en otras cosas.
Hoy que tengo un hijo está entre mis prioridades el darle lo mejor y pasar tiempo con él, pues de nada serviría si le doy el mundo y no tiene un padre; por eso trabajo en salirme del trabajo, asi es, ya no me importa la profesion que estudié o el puesto importante que me puedan ofrecer, todo eso lo cambiaria con gusto por algun negocio que pueda administrar y poder pasar mas tiempo con mi hijo y sé que lo voy a lograr, poco a poco, con mucho esfuerzo lograré ser independiente economicamente hablando y disfrutar de una verdadera libertad financiera.