Aunque los buenos resultados que se obtienen usando los software para facturar electrónicamente, pocos son los contribuyentes que cuentan con él. De los aproximadamente 5 millones de contribuyentes que están registrados en el Sistema de Administración Tributaria (SAT) y que deben mudarse a este sistema –por obligatoriedad- al cierre del 2010 solo lo habían hecho un 4 por ciento de dichos contribuyentes.
Esta comprobado que con el uso de facturación electrónica se reducen los costos en gran medida y sobre todo la empresa se vuelve mucho más productiva y se elimina el riesgo a intercambio de información falsa, pues las facturas electrónicas tienen un sello digital que se puede comprobar con el SAT.
Actualmente, solo 221 mil 815 de los 5 millones de contribuyentes registrados en el SAT cuentan con el sistema de facturación electrónica y según opiniones de dicha secretaria, los contribuyentes no se han mudado a este nuevos sistema debido a que no se han terminado de organizar, siguen imprimiendo las facturas en papel o no le tienen “confianza”.
Por ley, los contribuyentes quienes en su declaración del 2009 presentaron ingresos iguales o mayores a los 4 millones de pesos tienen que cambiarse al sistema de facturación electrónica. El software se puede conseguir desde 580 pesos y es muy fácil de utilizar.
