La enfermedad conocida como “artrosis” es un padecimiento que afecta a personas tanto de mediana como mayor edad. Los síntomas de esta enfermedad van desde unas pequeñas molestias, hasta un dolor totalmente incapacitante y el tratamiento de esta enfermedad busca la disminución del dolor y la mejora de la movilidad de la respectiva circulación. Cuando no se consigue el alivio esperado, se puede proceder a la cirugía de cadera.
El cirujano que llevará a cabo esta cirugía, es quien finalmente evaluará si se puede y si se debe realizar en su caso determinado, una sustitución de la prótesis de cadera. Lo que se evaluará es finalmente la fuerza del miembro y de sus caderas, su función articular y cómo es que se sienta, se inclina y se mueve el determinado paciente. En caso de que la radiografía muestre un daño severo, el cirujano ortopédico puede sugerir la cirugía de cadera para una sustitución articular.
La sustitución de la prótesis de cadera, ha evolucionado, hasta el punto que se ha convertido en uno de los procedimientos más reproducibles y más seguros según las estadísticas. Esta sustitución ha logrado transformar la vida de miles y miles de pacientes, a quienes se les brinda la oportunidad de ser nuevamente activos con menos dolor.
A. Verástegui
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