Los sistemas biométricos analizan las partes del cuerpo humano, para un proceso de verificación e identificación. Para tener resultados confiables se hace uso de las partes del cuerpo, que son únicas en cada persona; las cuales son llamadas indicadores biométricos.
Actualmente, existen varios tipos de sistemas biométricos, pero los dispositivos que se usan con más frecuencia son los de huellas dactilares. Otros aparatos como los escáneres de patrones oculares o de la forma de cara, no se usan con tanta frecuencia debido a su alto precio. Sin embargo, estos son aparatos que brindan resultados inigualables.
Este tipo de tecnología tiene muchas utilidades, en nuevos sistemas de seguridad, porque los métodos tradicionales tenían muchas limitaciones. No es un secreto que, las puertas con llaves convencionales, podían ser superadas de muchas maneras, después de todo cualquiera podía clonar o robar una llave. Algo similar sucedía con los sistemas que usaban tarjetas electrónicas o contraseñas, puesto que éstas podían llegar a personas equivocadas de muchas formas.
La biometría termina con todos los problemas que los sistemas anteriores nunca pudieron derrotar. Desafortunadamente, los sistemas biométricos no han tenido mucha difusión, por lo que muchas personas aún no están al tanto de su existencia. Además, algunas personas piensan que, con estos sistemas, las libertades civiles son afectadas o que estos sistemas pueden lesionar la salud.
Lo primero a comprender es que hay que entender es la diferencia que hay entre los sistemas biométricos comerciales y los que usan las organizaciones del estado. En el caso de los primeros, éstos no almacenan información biométrica de ningún tipo. Estos sistemas analizan una característica y crean una secuencia de números, basándose en ella, para la identificación de una persona. Es decir, que no almacenan en su memoria imágenes de huellas o de patrones oculares, sólo identifican algunos puntos de estas cualidades, para crear una secuencia de identificación personal. Con este tipo de configuración la información biométrica, de las personas, nunca estará en riesgo de ser robada o mal utilizada.
De igual manera, los sistemas biométricos no son nocivos para la salud. La creencia de que los dispositivos, para el análisis de patrones oculares, usan rayos láser es infundada. De hecho, estos aparatos usan cámaras que no afectan de ninguna manera la salud de la visión.
Los sistemas biométricos no sólo aportan magníficos resultados, sino que también son respetuosos de la privacidad y de la salud de sus usuarios. Es por ello que su uso tiene muchas ventajas y ninguna consecuencia negativa posible.
Los sistemas biométricos analizan las marcas dactilares, por ejemplo, y por ello son lo mejor para un control de acceso.
