La crisis dejó a su paso un sinfín de problemas económicos y retraso en las industrias de nuestro país.
En México existen pocas industrias que han presentado un verdadero crecimiento y recuperación significativa después de la crisis, sin embargo, la industria envasadora ha logrado y seguirá logrando una mejora en los números, incluso se espera que durante el 2011 alcance un aporte al PIB nacional del 1.5%. Los expertos afirman que la rápida recuperación de la industria envasadora se debe principalmente a que toca muchas otras industrias a la vez, ya que existen envasadoras tanto para el sector farmacéutico como alimenticio y por supuesto, de bebidas. Probablemente la envasadora más representativa es la que se encarga de manejar refrescos y cervezas, pero es innegable las proyecciones positivas para la industria envasadora en un futuro cercano. Se estima que este crecimiento se debe a la evidente necesidad de aumentar la productividad, bajar precios y costos, así como mantenerse en constante innovación que sienten las empresas mexicanas para seguir favoreciendo la generación de empleos.
Además, en realidad prácticamente todos los productos que se encuentran a nuestro alrededor han pasado por un proceso de envasado en seco o líquido, así que no es difícil ver la impresionante presencia de la industria envasadora en nuestra vida y por su puesto la influencia que tiene en la forma de vender y consumir alimentos, bebidas y fármacos. Definitivamente forma parte de la lista de procesos que hacen nuestra vida realmente más fácil, por lo tanto, es importante apoyar su crecimiento y desarrollo.
