¡Si! orgullo de ser y pertenecer… ¡Si! orgullo de servir y dar… ¡Si! el orgullo de morir por… Aunque nos quiten alguna frase que colgaban en nuestras puertas de entrada.
¡Si! el orgullo de un cuerpo y sus miembros… que tanto estamos dando y hemos dado por nuestro querido país.
Y recordar que hubo años que escondían a nuestros muertos… Pero, ¡ahora! Hasta nuestros reyes vienen y nos cubren de gloria y nos acompañan en nuestro dolor.
¡Si! el orgullo de un servicio hecho. ¿Sin armas, con armas?, da lo mismo… estamos en ello.
Hay fronteras, hay leyes, hay compañerismo, hay cooperación y en medio de una investigación, somos nosotros los primeros que servimos y sufrimos sin rendición.
No hay pactos, no hay excusas, y todos sabemos que “un fallo” puede ser la muerte, “un error de apreciación” puede ser más que una herida y “una desincronización” puede acabar en atentado…
¡Si! El orgullo de ser. Somos humanos, hombres y ahora también mujeres que con nuestro esfuerzo nos vamos forjando, para dar el mejor servicio, que para eso estamos.
En estos últimos días mi compañero Raul nos ha dejado. Y mientras escribo esto, mi compañero Fernando esta sin estar a mi lado.
A los dos… ¡Un fuerte abrazo!.
Pd. En la entrada de muchas casernas de la guardia civil se podía leer “Todo por la Patria”... Y aquella Patria, se refería (ni más ni menos) a nuestra querida España.