La primera de las razones, es la más obvia, por temor a que nos toque un vaquetón, flojo y mantenido.
Otra un poco más liberar, es porque no obliga estar con una misma persona por el resto de nuestras vidas.
Los más graciosos son los que dicen por miedo a que nos dejen después de llenarnos de hijos y de subir de peso.
Mientras existen quienes piensan que no es miedo precisamente si no que aún no han encontrado a la persona ideal para ellos.
También se suele ver al matrimonio como un sinónimo de mujer sufrida, y no es así si se encuentra al verdadero amor.
Más bien creo que no es miedo la palabra si no algo así como el deseo de independencia y de la necesidad de no sentirse dependiente de alguien y menos de un hombre. El matrimonio si bien exige algunas conductas, tampoco es un manual de robótica, las mujeres somos libres y cada vez más y más el hecho de matrimoniarse ya no significa que nos quedaremos con el mismo hombre por el resto de nuestras existencias, Ahora existe el divorcio, solución para nuestra posibles penurias. Una siempre cree que el hombre con el que está es perfecto, hasta la convivencia, no siempre es así… Como digo es preferible terminar por lo sano que por lo no sano y más si hay niños de por medio.
Estos son algunos de los comentarios que he oído, el mío es el último… Espero haberte ayudado.
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