Los psicólogos son probablemente las únicas personas a las que una persona puede convencer. Otras personas pueden comenzar a juzgarlo, pueden sentirse ofendidos por lo que dices, o pueden pensar que eres raro.
Cualquiera sea el caso, siempre puedes confiar en que los psicólogos te ayudarán con cualquier tipo de problema mental que puedas enfrentar. Al igual que los médicos, también hay diferentes tipos de psicólogos. El tipo más popular de psicólogos son los psicólogos clínicos y se ocupan de problemas tales como; estrés, ansiedad, problemas de relación, depresión, problemas de aprendizaje, problemas familiares y enfermedades mentales. Aparte de los psicólogos clínicos, hay psicólogos educativos (también conocidos como consejeros a veces), neuropsicólogos (que identifican lesiones relacionadas con tu cerebro), psicólogos profesionales (el tipo que tienes en las organizaciones a menudo en el momento del reclutamiento y la redundancia), psicólogos forenses (que ayudan con los procedimientos legales en los tribunales, comportamiento criminal, etc.), psicólogos deportivos (aunque raros, trabajan con el equipo y los mantienen mentalmente centrados) y, por último, psicólogos de la salud (ayudando a las personas a dejar de fumar, alcohol, drogas y también cambiando la forma en que la gente ve la enfermedad o su salud).
Ahora que sabe todo sobre los tipos de psicólogos que existen, puede llevar sus problemas a un tipo específico para un tratamiento más especializado. Los psicólogos privados pueden ser más útiles que los que tienen en las instituciones públicas, aunque no es como si no estuvieran lo suficientemente cualificados o algo por el estilo. Se trata más de cuánto tiempo y esfuerzo le da el psicólogo a un paciente en particular. Como un psicólogo privado cobrará más, pero puede esperar verlos mucho más rápido.
A veces hay casos especiales que requieren más atención, clientes que requieren más participación, y ese nivel de participación es algo que siempre debería estar experimentando de parte de psicólogos privados. A veces, uno no desea ser muy directo o directo con cualquier psicólogo clínico, por lo que puede tomar las cosas a un ritmo con el que se sienta cómodo visitando un profesional privado en el campo de la psicología.
Puede haber muchas razones para ser así, es posible que tenga un problema muy delicado en el que no haya hablado con nadie y tenga problemas para compartirlo, o incluso podría desear desarrollar algún tipo de confianza antes de proporcionarle información al psicólogo sobre el estado de tu mente Cualquiera sea el caso, solo tenga en cuenta que son profesionales y su trabajo es escuchar a la gente y escucharlos; están obligados a mantener la información privada y no compartirla con los demás.
Ningún psicólogo colegiado se arriesgaba a dar información sobre pacientes o violar su confianza, ya que puede tener muchas implicaciones en su fiabilidad y reputación. Entonces no dude en compartir lo que tiene en mente cada vez que vaya a un psicólogo.
Para más información: Web de la psicologa Paula Cañeque
