Los patrones de consumo de los españoles también se ven afectados por la crisis. Según los últimos datos, el consumo de cerveza en los bares ha caído un 20%. Sin embargo, lejos de lo que pueda parecer, este dato no significa que haya disminuido el consumo total de cerveza: el consumo en el hogar ha aumentado en la misma proporción. Esto significa que los hábitos de consumo están cambiando, que cada vez más personas deciden consumir sus marcas de cerveza preferidas como Mahou en sus hogares en vez de en los bares.
La causa principal de este cambio de hábito de consumo está relacionada con la coyuntura económica, la crisis y la pérdida de poder adquisitivo de las familias. Los consumidores no han renunciado a beber cerveza, simplemente deciden comprarlas en los supermercados y consumirlas en sus hogares, lo que supone un gran ahorro. Una lata de Mahou comprada directamente en un supermercado es tres veces de media más barata que en un bar.
Este nuevo patrón de consumo tiene un efecto negativo en la economía, principalmente en el sector de la hostelería, lo que afecta también al empleo, al turismo e incluso a Hacienda. Hay que tener en cuenta que en los bares el 30% de la recaudación depende directamente de la cerveza. Este hecho supone también un cambio sociológico ya que hasta ahora el bar era un punto de encuentro entre las personas, un núcleo importante de socialización y de esparcimiento donde poder conversar con amigos y compañeros de trabajo mientras se consumía una cerveza.
