Ya estas particularmente sensible cuando te encontrás en Europa, el viaje de tu vida, el encuentro con ese viejo deseo de ver de cerca lo que conoces por libros, películas, documentales.
Imaginate entonces que tenés la mala suerte de caer en un hotel que te min´tió sobre su ubicación y servicios. Parece sobredimensionado en referencia a estar en tu viaje soñado.
Sin embargo, imginate que no confias en el hotelero, porque te maltrata, porque te miente, porque los servicios que contrataste son inexistentes y fingen en tu cara que vos sos la idiota que se confundió.
Todas estas cosas empaña cualquier aventura, y te va empeorando la estadía cuando no podés confiar en que contarás con las personas que supuestamente te alojan porque venden sus servicios como de hotel, cuando son simples caseros de habitaciones con inexistentes servicios.
Esto es exactamente lo que nos pasó en el Core de Roma, en Roma, Italia.
Tenemos fotos y videos de lo que verdaderamente es ese hotel, lo demás se puede deducir. La estancia en dicho establecimiento no sólo fue tortuosa, sino que nos perjudicó en tiempos perdidos´, que es lo más valioso que se puede perder cuando estás de viaje.
Ojalá este artículo sirva para que a otros no les pase lo mismo.
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