Se ha hecho de la cultura un pretexto para quedarse a medio camino, para no evolucionar definitivamente. El conocimiento es como una moneda ilegítima que pasa de mano en mano, que nadie quiere quedársela. El tarot es una moneda legítima e intransferible por su poder verdadero, por su autenticidad, porque comunica sabiduría e intenta siempre protegernos adelantándose a los acontecimientos.
Podemos ofrecer técnicas para que cada uno desarrolle su existencia y su sabiduría, pero cuando se interpretan las cartas del tarot de manera eficaz, se convierten en sabiduría al servicio del conocimiento, puesto que tienen la capacidad de ver inequívocamente los errores venideros, alertándonos de los pasos en falso que se avecinan, y por ello nos advierten, con el fin de evitarlos, convirtiéndose así en sabiduría magistral.
Ni siquiera podemos imaginar, tal y cómo serán las cosas mañana, aún utilizando el conocimiento. Encerrados a veces en nuestras actitudes egocéntricas se nos escapa la visión de la realidad tal y como muchas veces es. Hay muchas maneras de ver las cosas y una sola manera de ver las cosa tal y cómo son, de ahí arrancamos en la visión de las cartas del tarot, ver la realidad por dura que sea tal y como es, pero sobre todo tal y como será.
Berta de la Torre
Utiliza tu sabiduría y consulta las dudas.
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