Conozco a muchas personas con discapacidad intelectual pero no conozco a ninguna de ell@s que NO desee mejorar su vida hacia la independencia personal.
He visto el avance de estos jóvenes con una mejor formación y preparación con respecto a los más mayores, también sus dificultades reales para la plena integración social en la Comunidad, paralelamente han ido mejorando sus derechos respaldados en la famosa “LISMI” y más recientemente en la “Convención Internacional de Personas con Discapacidad” entonces ¿A qué esperamos?.
Mario ha ido a la escuela y tiene el graduado como mucho de sus compañeros del Centro Ocupacional, desde pequeño le han ido protegiendo y dirigiendo, siempre le han dicho lo que tiene que hacer y muy pocas veces le han preguntado ¿qué desea hacer él?.
Llega un momento, que “se planta”, en su entorno no comprenden ¿qué le pasa a Mario?, se encuentra “contestón”, “enfadado con todos” y hasta en alguna ocasión ha podido “perder los estribos”. Algo en su interior también ha cambiado, se siente mayor pero a su alrededor siguen pensando que “se puede perder sólo por la calle” o simplemente “puede atropellarle un coche”.
_¡Ya está bien! grita Mario (le oyen pero no le escuchan). Le han preparado durante muchos años para este momento y ahora quiere tomar una decisión personal importante.
– !No quiero vivir con los papás!, ¿y ahora qué?.
Seguirá….
Pd.: Mario es una personaje con discapacidad intelectual de ficción que tiene 30 años.